Neruda tenía un estrecho lazo con China. Visitó el país en dos oportunidades.
AFP.BEIJING.- Hoy se presentó en China la versión traducida de "Veinte poemas de amor y una canción desesperada", de Pablo Neruda.
La obra, de la que se han editado 100 mil ejemplares, busca mostrar al público chino el Neruda más íntimo, después de que el premio Nobel de Literatura 1971 se hiciera conocido en ese país en la década los cincuenta, sobre todo por sus obras de contenido político.
La presentación, en la embajada chilena en Beijing, incluyó un debate con varios profesores universitarios y expertos chinos en literatura en lengua española, quienes destacaron la vigencia de Neruda tras 110 años de su nacimiento y 41 de su muerte.
Neruda "podía ser profundamente lírico, aunque también intensamente político", destacó el embajador chileno, Jorg Heine, quien también recordó la estrecha relación que tuvo el poeta con China, un país que le fascinó y que "despertó su imaginación como pocos".
Neruda viajó al país oriental en dos ocasiones, en 1951 y 1957 (tras la victoria en 1949 de los comunistas chinos capitaneados por Mao Zedong en la guerra civil).
Además, Heine recordó que Neruda fundó hace más de 60 años junto con Salvador Allende y el pintor José Venturelli el Instituto Chileno-Chino de Cultura, a fin de promover los intercambios culturales entre ambos países.
El académico y crítico literario Zhi An señaló que este libro ofrecerá "una nueva cara de Neruda" a los lectores chinos, que hasta ahora solo han disfrutado de traducciones a su lengua de obras de contenido básicamente político, aunque no exclusivamente.
Zhi aseguró que el poeta chileno sigue siendo muy actual para los lectores de todo el mundo, comenzando por esta obra: "El amor es algo eterno y sigue teniendo actualidad en el siglo XXI", afirmó.
Este experto destacó que Neruda es uno de los poetas extranjeros de esa época más famosos en China y que "Las alturas de Macchu Picchu" (completado en 1945) "influyó mucho en los poetas chinos y sigue siendo muy de actualidad".
Para Zhi, la traducción, obra de un traductor de Taiwan, ha sido bien realizada dentro de la gran dificultad que supone trasladar poesía entre lenguas tan dispares, en las que no solo las palabras sino los conceptos pueden variar mucho.