Tras su regreso a los escenarios d de la mano de su repertorio pop, Stevens se embarcó en una gira que lo trajo a Chile en 2013.
La SegundaNUEVA YORK.- Yusuf Islam, el artista que alcanzó fama universal bajo el nombre de Cat Stevens, ya tiene listo un nuevo álbum de música popular, noticia de por sí llamativa en el contexto de su retiro, conversión al islam y posterior regreso, pero a la que ahora agrega otro inédito antecedente: La realización de su primera gira norteamericana en 35 años.
Stevens, quien se convirtió al islamismo en 1977, unió creaciones propias con algunos "covers" de clásicos en el álbum Tell 'Em I'm Gone (Diles que me fui), que se estrenará el 27 de octubre.
El artista británico, que en sus años de gloria se transformó en una de las voces más reconocibles del folk, ya lanzó el primer sencillo de este nuevo álbum, una versión de la canción de 1971 "Dying to Live", de Edgar Winter,, la que aborda con fidelidad.
Yusuf, de 66 años, dijo en un comunicado que había descubierto, como parte de su "exploración musical y espiritual de 50 años", que tenía "un alter ego de R&B que esperaba su liberación", aludiendo al género más presente en este nuevo trabajo.
"Lo que a mi juicio es poderoso y profundo es el mensaje general que emergió, líricamente", agregó Yusuf.
"¡De golpe me miró fijamente a los ojos la lucha innata por la libertad!", prosiguió en el documento. "La música, y particularmente el blues, son formas de escapar para muchos de los que están encadenados a los ricos y poderosos".
Junto con este anuncio, Stevens ratificó una breve gira de seis conciertos en Estados Unidos y Canadá en diciembre. La última vez que hizo un recorrido en esa región fue en 1976, cuando estaba en la cumbre de su fama.
Sin embargo, luego vino la conversión religiosa del autor de éxitos como "Wild World", "Father and Son" y "Peace Train", lo que desembocó en el cese de sus giras y su reemplazo por presentaciones pequeñas, vinculadas en su mayoría a nuevas piezas relacionadas con su fe. Eso hasta que en 2006 sacó el álbum An Other Cup, que marcó su regreso al pop.
En 2004 Stevens vivió un amargo incidente con el Estados Unidos post 11-S, cuando se le impidió la entrada al país porque su nombre apareció en una lista negra. El cantante afirmó que había habido un error en su identificación.