SANTIAGO.- Desde que comenzó a regir la política "cajero detonado, cajero multado", se han registrado 15 casos de infracciones cursadas por Carabineros y una baja en los ataques a las máquinas.
Según consignó "El Mercurio", entre el 3 y el 16 de septiembre han habido en total 24 ataques a bancomáticos, de los cuales sólo cuatro han sido consumados. Mientras que entre enero y julio de este año se registraron 288 robos a cajeros automáticos, de los cuales 192 resultaron frustrados y 96 efectivos.
Los ataques registrados se han realizado principalmente por la ausencia de alarmas y circuitos de monitoreo por video en línea de cajeros, elementos que desde que comenzó a regir la política, a comienzos de este mes, deben ser obligatorios.
"Ha habido una baja en los casos consumados. Lo atribuimos a los servicios preventivos nuestros y las mejoras de seguridad de los cajeros", explicó al medio el director de Seguridad Privada y Control de Armas, general Christian Fuenzalida.
A principios de mes, el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, anunció que el banco que sea propietario de un cajero automático que sea destruido producto de un "bombazo" o "saturación de gas", sería multado con cifras que podrían llegar a los $40 millones. El monto señalado se conforma de una sanción de $20 millones por la falta de alarmas y una cifra parecida por ausencia de videos de seguridad en línea.
Según señaló Aleuy, el descenso de los ataques consumados se debe a las medidas de seguridad que se implementó con la nueva política, puesto que "las medidas de seguridad, como cámara, alarma, empotramiento y anclaje, son fundamentales para desincentivar el delito ya que el delincuente elige los ajeros más vulnerables".