PARÍS.- "Algunas obras y documentos pueden resultar chocantes para el visitante", cita una advertencia que se lee desde hoy en la entrada de la exposición "Sade. Atacar el sol", que se presenta en el parisino museo d'Orsay.
La imponente muestra, conformada por más de 500 lienzos de Goya, Ingres, Rodin, Picasso o Max Ernst, se inspira en el pensamiento libertino del autor de "Los 120 días de Sodoma".
Así, Francisco de Goya compone caníbales que preparan a sus víctimas, mientras que Gustave Courbert pinta a dos mujeres desnudas sinuosamente colocadas una junto a la otra. Paul Cézanne, en tanto, pinta a un hombre que estrangula a su amante sobre la cama y Aguste Rodin retrata a una joven que parece masturbarse.
Con todas estas obras en las que la bestialidad y el placer se liberan de ataduras religiosas, mitológicas o históricas, el museo busca reivindicar a Sade en el bicentenario de su muerte, que se cumplirá el próximo 2 de diciembre.
Sade aparece representado como precursor de una imagen liberada de la sensualidad, la avidez y la violencia en la pintura de los siglos XIX y XX. "Sade fue un impulsor para que el siglo XIX mostrara lo que aún no podía decirse", explicó Laurence des Cars, una de las comisarias de la muestra, añadiendo que el marqués dio rienda suelta a su eros animal, por lo que a menudo sus libros se toparon con la censura.
"No hemos hecho una exposición para provocar", subraya Des Cars, aunque ya el c arte l de advertencia resulta provocador.
Según esta historiadora del arte , la muestra no recoge todo lo que pictóricamente está relacionado con el placer y la violencia, sino que también ha sido sometida a la "autocensura". Por ejemplo, el visitante no verá pinturas con personajes pederastasa.
Pese a que las obras del marqués de Sade fueran prohibidas, se imprimieron numerosas copias ilegales que sirvieron de inspiración a autores como Baudelaire, Shellay o Huysmans. En el arte , en cambio, su influencia directa es más difícil de probar. "Sólo los surrealistas reconocieron a Sade como uno de sus precursores", señala la comisaria.
Cabe destacar que esta exposición, que estará abierta hasta el 25 de enero, fue rechazada por el Louvre en el último minuto.