Quieres ver tu clima local?
Mostrar
Santiago: Sábado 27 de julio del 2024 | Actualizado 12:14
Fanáticos de El Señor de los Anillos ya están en Nueva Zelanda
MATAMATA, Nueva Zelanda.- A mediados de 1998, un granjero neozelandės de casi 70 años llamado Ian Alexander, veía un partido de fútbol en el living de su casa, cuando recibió una llamada que cambiaría su vida: Un cineasta quería rodar una mega-producción, y concluyó que sus tierras eran el lugar perfecto para hacerlo.
"¿Una pelicula aquí? ¿Pero por qué? ¿Por qué a usted le interesa mi granja de ovejas para grabar una película?", fue lo que respondió Alexander a Peter Jackson, el hombre que realizó la llamada, y quien había encontrado su locación perfecta gracias a un sobrevuelo por la zona de la granja.
Por aquel entonces, Jackson no tenía la reputación que hoy ostenta. Hacia fines de los noventa, era reconocido como autor de cintas de bajo presupuesto, no de grandes proyectos para Warner Bros. Su pieza maestra era "Criaturas celestiales", donde Kate Winslet daba vida a una adolescente que, junto a su joven amante, decide asesinar a quienes puedan interferir en su relación homosexual.
Así, el nombre del director estaba lejos de ser significativo para el anciano. Es más: El granjero ni siquiera sentía atracción por el cine. No obstante, aceptó reunirse con Jackson y conocer su propuesta. Y lo que escuchó le gustó.
Ian Alexander negoció por ocho meses las condiciones en las que arrendaría su terreno. El tiempo fue extenso, porque tenía que precisar los detalles relativos al funcionamiento de su granja, pues él no iba a dejar de lado a sus ovejas por una película. No importaba que fuera un proyecto de Hollywood ni que estuviera basado en "El señor de los anillos" de J.R.R. Tolkien.
La cinta, finalmente, se grabó, y lo que vino después es por todos conocido: Más de mil millones de dólares en ganancias, premios Oscar para Jackson y su equipo, y la creencia de que Nueva Zelanda es sinónimo de Tierra Media.
Y si Nueva Zelanda logró convertirse en la Tierra Media, la parcela de los Alexander pasó a ser el mismísimo hogar de los hobbits Frodo y Bilbo Bolsón, protagonistas de "El señor de los anillos" y "El Hobbit", respectivamente.
"Las películas cambiaron por completo nuestras vidas", cuenta a Emol el hijo de Ian Alexander, Russell. Él es quien maneja la granja y mantiene con vida el set construido por Jackson, el cual es visitado a diario por cientos de fans.
No a los parques temáticos
"Hobbiton" se llama la ciudad construida en el terreno de los granjeros, quienes accedieron a abrirla al público tras el fin del rodaje de "El Hobbit: una aventura inesperada". El alto interés de los fanáticos de las franquicias en esta zona llevó a los Alexander a convertirla en destino turístico, e incluso en un lujoso centro de eventos.
"Hemos hecho 60 matrimonios, 60 cumpleaños, también aniversarios de matrimonio. Muchos vienen a celebrar sus bodas de oro acá. Tambien hacemos un montón de eventos corporativos y funciones privadas (de las películas)", explica Russell.
Y eso es posible gracias a que en la ciudad de los Alexander se edificó el bar de las películas, The Green Dragon. Allí se realizan todas esas celebraciones a un precio que se establece en cada caso, dependiendo de la extensión del evento, número de invitados, menú y mano de obra involucrada.
Si bien Hobbiton dispone de espacio para recrear otras locaciones de la película, sus dueños no quieren hacerlo. "Queremos mantenerlo auténtico. No nos interesa aumentar la comercialización", dice Russell Alexander. "Hace un año fui a Estados Unidos a ver el parque temático de Harry Potter en Florida, pero la verdad es que no quiero hacer algo así. A Warner sí le interesa que aumenten este tipo de recintos, pero a nosotros nos gusta la magia que se siente acá".
Para fin de año se espera un aumento en el número de visitas a Hobbiton, debido al estreno de "El Hobbit: la batalla de los cinco ejércitos", último filme de la franquicia.
La película llegará a Chile el 11 de diciembre, pero esta semana habrá una chilena que podrá verla antes: Se trata de Amanda Medina, quien se encuentra recorriendo Nueva Zelanda tras ganar la versión chilena del concurso de fans impulsado por el propio Peter Jackson. Ella será una de las 75 personas que asistirá a la función que el director ofrecerá en su cine privado de Wellington.
