El rito

Es el nombre de la segunda canción del tercer disco de Soda Stereo, "Signos" (1986), y rato antes de que la banda de reggae chileno de exportación Gondwana la tocara esta noche de sábado en vivo en Santiago, el título ya tenía sentido para la ocasión. "El rito" fue la canción previa a la despedida del concierto de tributo a Gustavo Cerati protagonizado por más de veinte músicos y grupos chilenos en el recinto de Movistar Arena en la capital, y fue una buena definición para una jornada que tuvo partes iguales de saludo póstumo, encuentro y celebración.

Partió con cierto recogimiento y desembocó en fiesta. "Dedicamos esta canción a los 43 estudiantes mexicanos y sus familias. Fuerza, Latinoamérica", fue a las 21:25 horas el saludo inicial de Manuel García en la jornada, antes de tocar "Sulky", una de las canciones del disco "Siempre es hoy" (2002) de Cerati como solista. Un cuarteto junto a su socio Ángel Parra y Diego Álvarez en guitarras, más Danilo Donoso en percusión, fue el formato elegido por García para la presentación, que arrancó así con cierta solemnidad tras la proyección de un video del artista argentino Gustavo Maso con la voz de la madre de Cerati, Lilian Clark, incluida a modo de testimonio.

Titulada igual que el disco doble de tributo "Te veré volver" grabado este año por los mismos músicos del concierto junto a varios otros, la jornada estuvo sujeta a ese repertorio, y cada músico o solista tuvo los minutos justos para presentar en vivo su canción escogida ante las aproximadamente cinco mil personas que llegaron al lugar. Aparte de garantizar la agilidad del concierto, esa opción permitió apreciar cómo la música de Cerati ha sido influencia para diversas generaciones de músicos pop en Chile, evidencia acentuada por el orden en que aparecieron los intérpretes en escena.

El primer segmento fue casi monopolio de grupos y solistas que desarrollaron su carrera en paralelo a Soda Stereo y Gustavo Cerati en los años '90, con Javiera & los Imposibles, Nicole, Lucybell, Canal Magdalena o De Saloon, entre otros. Y la segunda parte del show se equilibró con naturalidad hacia nombres más recientes como los de Pedropiedra, Camila Moreno, los hermanos Álvaro y Gonzalo López de Los Bunkers, Leo Saavedra de Primavera de Praga, María Colores o Fernando Milagros. Todos ellos se presentaron, además, con el respaldo de dos bandas de apoyo integradas a su vez por músicos de Chancho en Piedra, Los Tetas, Los Bunkers, De Saloon y Astro, entre otras.

Lo transversal del encuentro quedó reafirmado por la presencia de precursores como los citados Gondwana al cierre o la dupla entre los hermanos Pedro y Felo Foncea, de la decana banda funk De Kiruza, quienes se hicieron cargo de uno de los momentos más sentidos de la noche con una versión soul de "Tu medicina". Y en especial cumplió ese cometido la incorporación del audio de la canción "De lluvia a granizo", de Isabel Parra, dedicada también a Cerati e incluida en el más reciente disco de la histórica cantante y autora chilena, "Con los pies sobre la tierra" (2014), editado hace apenas unas semanas: una despierta reacción de los organizadores que dio un sentido más amplio a la jornada.

Un significado especial tuvo la visita de los músicos argentinos Richard Coleman y Leo García, ambos colaboradores de Cerati en distintos momentos de su carrera. Coleman, hijo de los mismos años '80 de Soda Stereo con su grupo inicial Fricción, tuvo la delicadeza de regalar unas estrofas acústicas de "Estoy azulado", canción del disco "Nada personal" (1985), antes de ir más atrás en la historia y recrear "Trátame suavemente", melodía original de Daniel Melero grabada por Soda Stereo en 1984 en su disco debut. Y García vino más tarde a poner actualidad con una de las mejores melodías de Cerati solista, "Lago en el cielo", de su penúltimo álbum, "Ahí vamos" (2006).

También es llamativo el claro predominio de canciones de Soda Stereo en la elección de los músicos chilenos convocados. Sólo Manuel García, Javiera & los Imposibles, Claudio Valdez, Gonzalo Yáñez, María Colores y Fernando Milagros escogieron melodías del tramo solista de Cerati, como parte de un promedio en general que además se muestra respetuoso de las versiones originales. En ese sentido se destacan las versiones de Nicole y Camila Moreno, que se apropiaron de "Té para tres" y "Zoom" y tiñeron esas melodías con sus respectivas identidades vocales, tal como María Colores tradujo "Lisa" a un lenguaje más acústico a partir de las cuerdas de su cuatro. El cierre fue desatado, con los más de 35 músicos en escena y una mezcla de entusiasmo con cierto desorden para recrear en conjunto, con la guitarra eléctrica de C-Funk al mando, dos canciones finales de Soda Stereo, "Juego de seducción" y "Primavera cero". El rito terminó en jolgorio.