Durante la década de los 2000, Los Nocheros tuvieron su momento de mayor éxito en Chile. En ese tiempo repletaban recintos, y las radios nacionales programaban una y otra vez sencillos como "Cuestión de piel" y "Boca roja", lo que los llevó a presentarse incluso en el Festival de Viña del Mar (2003). "Cuando llegamos con esas canciones éramos parte del momento de la música del país (…) En Chile tocamos la cúspide", asegura el músico Mario Teruel, uno de los fundadores de la agrupación.
La realidad hoy es algo diferente: Aunque mantienen un público fiel, para buena parte de la audiencia los argentinos parecen un nombre del pasado. Pero a los integrantes del cuarteto eso es algo que los tiene sin cuidado. "Quizás la masividad de los otros años se ha cambiado por la popularidad, que son dos cosas muy distintas", afirma Teruel, quien cree que el proceso tiene que ver con su tiempo en la música: "La gente nos sigue parando en la calle como muestra de cariño, pero ya no lo hacen con la euforia de antes. Es un momento al que se llega cuando los artistas llevan varios años".
Con esa carga es que Los Nocheros regresarán a Chile este mes, en el marco de una gira que arrancó recién el viernes 9 de enero, y que tiene una novedad de peso para sus seguidores: El regreso de Kike Teruel, quien había dejado temporalmente la banda el año pasado. Las presentaciones serán el jueves 29 en el Teatro Caupolicán y el viernes 30 en el Anfiteatro de San Bernardo.
"Estamos nuevamente ante otro nuevo proceso que, si bien es el mismo de siempre, el hecho de haber quedado como un trío y ahora retomar el cuarteto hace que sea todo renovable", explica Mario Teruel. También agrega: "Ahora estamos cantando con Kike algunas de las canciones del trío que a la gente le han gustado, y eso también es otro aditivo muy lindo a nuestro presente".
Sobre el instante en que su hermano Kike abandonó la banda, Teruel dice que "él necesitaba descansar, hace tiempo venía pidiéndonos eso". Cuando esto sucedió, Los Nocheros contemplaron no seguir adelante, aunque luego lo repensaron: "En un primer momento dijimos que lo íbamos a detener todo, pero resulta que después con Rubén y Álvaro llegamos a la conclusión de que nosotros tres teníamos ganas de seguir cantando".
Entonces propusieron a los productores continuar con los compromisos que tenían pendientes, y a partir de esto nació el disco Trío, el cual fue hecho en menos de dos meses. "A la gente le gustó la propuesta y nuestra sinceridad al querer seguir cantando", comenta el artista.
Sobre su retorno a los escenarios nacionales, el cantante se muestra entusiasmado: "En Chile siempre nos han tratado muy bien. Desde el primer momento, cuando no nos conocía nadie". Y eso corre para escenarios grandes, como el Teatro Caupolicán o el Festival de Viña del Mar, como para otros más pequeños, en el caso del Festival Folclórico de San Bernardo, que los recibirá el 30. "Las veces que hemos ido a festivales, como es el caso de ahora, lo disfrutamos mucho, tanto por la calidez como por la organización que tienen", afirma.
Las entradas para la presentación en el recinto de calle San Diego están en venta a través de Ticketek, por precios que parten en los $15.000 y llegan hasta $50.000; para el el evento folclórico, en tanto, los valores van de $1.000 a $3.000.