Actriz Claudia Pérez, amiga íntima de Lemebel, recuerda sus últimos días: "Estaba energético"

OLMUÉ.-  "Fue una noche de sentimientos muy encontrados", reconoce Claudia Pérez, visiblemente afectada por la reciente muerte del escritor Pedro Lemebel, con quien mantenía un vínculo muy estrecho desde hace varios años.

La actriz de "No abras la puerta" se encontraba festejando el gran debut de su marido, el también actor Rodrigo Muñoz, en el Festival del Huaso de Olmué -donde participó como comediante-, cuando se enteró de la noticia que empañó tanta alegría.

"Estábamos muy contentos, celebrando en el camarín el triunfo del Roro, cuando de repente me metí a Twitter y me encontré con esto…, y ese momento fue súper triste", dice.

Pérez, quien describe a Lemebel como "un amigo nuestro súper incondicional", lo había visitado por última vez hace dos días. "Estabamos nerviosos por lo que ocurriría en el Festival, así que lo fuimos a saludar y nos deseó mucha suerte y le envío mucha energía a Rodrigo", recuerda.

Sin poder evitar las lágrimas, afirma que "la noticia me da mucha pena y rabia", y luego hace una pausa para entonces reclamar: "El cáncer no perdona, y que se llevará así, como huracán, a una persona tan talentosa, genial y valiente, es súper injusto".

Respecto a cómo fueron los últimos días del escritor, Claudia Pérez cuenta que "Pedro tenía una fuerza impresionante. Lo fuimos a ver muchas veces al hospital y tenia una entereza admirable. El despertaba y se ponía a dibujar y escribir…, me decía 'léeme el monologo de Piñera, léeme este manifiesto', ya que justo ahora nosotros estamos montando una obra suya".

La actriz— que en el pasado participó de los montajes "Tengo miedo torero", "De perlas y cicatrices", "Cristal tu corazón"— había vuelto a trabajar con el también dramaturgo hace algún tiempo. "Lo veía lleno de energía e ideas súper fértiles. Estaba súper enérgico y creativo". De ahí que encuentre tan injusta su temprana partida.

La intérprete destaca que "él nunca estuvo solo. Había mucha gente a su lado, personas entrañables". Es que Lemebel era muy querido, y no sólo por sus amigos y familiares, sino que además por quienes admiraban su obra.

"Su mirada reflexiva y crítica la llevaba a un lugar cercano, y eso permitía que desde el señor que vendía barquillos en la playa hasta la señora más encopetada se acercaran a saludarlo. Era transversalmente reconocido y leído…, aun con toda su irreverencia", señala.

Aunque fue testigo que el escritor se mantuvo siempre activo, Pérez afirma que "desconozco la cantidad de cosas que escribió y no publicó, pero me imagino que deben haber muchas".

La esposa de Rodrigo Muñoz se devuelve esta tarde a Santiago junto a su familia para participar de todas las ceremonias con las que se despedirá a Pedro Lemebel. 

Los restos del autor están siendo velados en la Iglesia Recoleta Franciscana (Recoleta esquina Antonia López de Bello) hasta la medianoche. El funeral se llevará a cabo mañana en el Cementerio Metropolitano (Avda. José Joaquín Prieto Vial 8521, Lo Espejo).