Líder de Foster the People dice que en 2012 vino como "un chico" y que vuelve como "un hombre"

SANTIAGO.- "Me sentí como un chico. Miro hacia atrás y veo a un chico", dice Mark Foster, líder de Foster the People, al recordar la primera vez que vino con su grupo a la versión chilena de Lollapalooza. Pero desde esa imagen registrada en 2012 surge también aquella con la que se identifica de cara a su retorno al festival, tres años después. "Ahora, al regresar, me siento como un hombre. Tengo algo diferente que decir", sentencia.

Con ese ánimo llega a Chile el trío que se transformó en fenómeno mundial ese mismo 2012 de la mano del exitoso álbum Torches, y la razón parece ser una sola: El sucesor de esa placa, titulado Supermodel y editado en 2014.

"No traté de hacer ningún hit. Sólo quise hacer canciones", dice Foster respecto de ese segundo disco, dejando en claro que no lo enfrentó con la intención de repetir el fenómeno de su antecesor, que inundó las radios con singles que luego hasta musicalizaron spots publicitarios.

"Creo que fue una sorpresa para muchos de los fans. Es un disco muy diferente en relación con Torches, que era muy pop. Supermodel es un disco más orgánico, con una exploración más profunda, habla de cosas más profundas, preguntas que tenía acerca de mí, de Dios, de la vida... Y además, musicalmente, intentamos pequeñas cosas que nunca antes hicimos, y que creo que sorprendieron a mucha gente", profundiza Mark Foster sobre su última placa.

Una que no logró el impacto avasallador de Torches, por cierto, aunque el cantante, guitarrista y tecladista afirma que eso no es algo que le quite el sueño. "Creo que muchos se conectaron con el disco, lo entendieron", destaca. "Para mí es el mejor complemento. Quien puede hacer que alguien sienta, que alguien piense diferente, para mí es un artista. Eso para mí es el éxito: Más que la venta de discos, más que hacer dinero, es hacer arte", agrega.

Pero pese a lo satisfecho que está con la última placa, Mark Foster proyecta que en los 75 minutos de show que tendrá hoy en Lollapalooza (17:30 horas), la repartición será "mitad y mitad" entre sus dos producciones. Todo complementado con una gran energía que espera derrochar en escena junto a sus compañeros Cubbie Fink y Mark Pontius, luego de una breve temporada de receso.

"Sabes, tuvimos mucho trabajo el último año, y paramos en noviembre. Llevamos un par de meses parados, lo que ha estado muy bueno, hemos podido estar en casa, recargándonos. Así es que el show será muy energético. Estoy listo para bailar, y quiero ver a la gente exhausta al final del show".

Todo con miras a repetir o superar lo realizado en Lollapalooza 2012. "Oh man, recuerdo que me divertí un montón, creo que probablemente fue una de las mejores audiencias que hayamos tenido hasta ese momento", recuerda el líder de la banda, que además se presentará este lunes en un sideshow en La Cúpula.

"Fue muy sorpresivo para mí que en diferentes países alrededor del mundo les gustara nuestra música. Fue una de las cosas más potentes que me han pasado, que en diferentes países en que no hablan inglés como primera lengua, tocáramos canciones en inglés y luego escucháramos a toda la audiencia cantando en inglés, palabra por palabra. Es una de las mejores sensaciones del mundo. No me lo esperaba, fue una sorpresa. Una bonita sorpresa".