Murray junto a su esposa, a la salida de la ceremonia religiosa celebrada en la catedral de Dunblane.
Reuters.DUNBLANE.- Vestido con la tradicional falda escocesa y con música de gaita de fondo, este sábado se casó el tenista escocés Andy Murray.
El deportista contrajo matrimonio con su novia de toda la vida, Kim Sears, en la catedral de Dunblane.
A la salida de la catedral, el tenista de 27 años y su pareja, vestida de riguroso blanco, fueron ovacionados por muchos admiradores que llegaron hasta el templo.
Tras la ceremonia religiosa, los novios se trasladaron a Cromlix House, el hotel de lujo que es propiedad del vencedor de Wimbledon en 2013, donde se realizaría la celebración, junto a familiares y amigos.
Según el diario The Telegraph, los novios han solicitado a sus invitados que no hagan regalos y que destinen el dinero a organizaciones humanitarias.
Una larga relación
Murray y Sears eran novios desde 2005 y en 2008 se fueron a vivir juntos, antes de separarse, pro poco tiempo, al año siguiente.
Sears frecuentaba también el ambiente tenístico gracias a su padre Nigel, entrenador.
La ya esposa de Murray tiene también 27 años, es de nacionalidad británica y una apasionada de la pintura y de los perros.
En enero fue protagonista de una polémica durante las semifinales del Abierto de Australia, cuando las cámaras de televisión la captaron insultando al checo Tomas Berdych, rival de Murray.
Sears se tomó el asunto a broma y en la final, que su entonces novio perdió contra el serbio Novak Djokovic, se presentó con una camiseta en la que podía leerse el lema: "Aviso a los padres. Contenido explícito".
Dunblane, una pequeña ciudad no lejos de Glasgow, se engalanó para ser escenario de la boda de su más conocido ciudadano.
Murray pasó en esa ciudad gran parte de su infancia. Cuando tenía 8 años, un perturbado mató a 16 niños y una profesora en el colegio de primaria al que iba el ahora tenista, que se salvó encondiéndose junto a su hermano debajo de la mesa del director del centro.