La audiencia china es fundamental para la industria estadounidense.
Archivo El Mercurio.BEIJING.- Este lunes se demostró que la industria cinematográfica tiene un alto interés en el mercado chino, al firmarse un acuerdo por US$2.300 millones de dólares entre productores chinos, estudios extranjeros, empresas y firmas de inversión.
Los 36 acuerdos fueron firmados en el marco del Festival Internacional de Cine de Beijing, que cumple su quinta edición, y valen cerca de un tercio más que los firmados el año pasado, de acuerdo con Zhao Zhiyong, miembro del comité organizador del festival.
El ex presidente de Walt Disney Studios firmó un acuerdo con CITIC Guoan, una unidad de la empresa estatal CITIC Group Corporation, para invertir 150 millones en sus nuevos Dick Cook Studios.
Cook, presidente y director general de los estudios, dijo en la ceremonia de firma: "Nuestras negociaciones con CITIC Guoan siempre han retomado la importancia del entretenimiento familiar, ya sea a través de las películas, televisión, libros e incluso en productos que aún no han sido inventados. En los próximos años buscaremos contar historias de calidad para toda la familia que vivirán de generación en generación".
Beijing Hairun Pictures, la rama de producción cinematográfica de la empresa china de producción televisiva Hairun Media Group, y Village Roadshow Pictures Asia — cuya matriz es la compañía de Los Angeles Village Roadshow Entertainment Group—, firmaron un acuerdo para coproducir cinco largometrajes. Uno será una cinta sobre la vida de Stephon Marbury, el ex jugador de la NBA que ha llevado a los Beijing Jinyu Ducks a tres campeonatos de la Asociación China de Básquetbol tras mudarse al país hace cuatro años. Marbury actuará como sí mismo en la cinta, según ambas empresas.
Una serie de producciones de Sino con empresas extranjeras fueron anunciadas incluyendo "The Beast", una animación de coproducción chino-neozelandesa, "Under the Dancing Stars", coproducción chino-irlandesa sobre una historia de amor y danza que se desarrolla en Irlanda y Mongolia, y la chino-australiana "Girl of Ashima", basada en un cuento popular chino.
Otros acuerdos incluyen un fondo para ayudar a jóvenes cineastas y para la construcción de cines y un parque temático.