Final de "Mad Men" encuentra aprobación entre fanáticos más acérrimos de la serie

SANTIAGO.- Tras ocho años en la pantalla, "Mad Men" se despidió anoche de sus seguidores en la TV estadounidense, y hoy se alista para hacer lo mismo en buena parte del resto del mundo —Chile incluido, vía HBO—, cuando se emita a través de señales de TV paga.

El epílogo no ha pasado inadvertido: En concreto, se trata de una de las series que no sólo ayudó a revitalizar el género, sino que además le dio nuevos aires y nueva altura, mediante una apuesta que ha sido aplaudida desde su arranque en 2008.

De ese modo logró captar diversos galardones, además de millones de seguidores en el mundo, quienes se enfrentan en estas horas al episodio "Person to person" (el número 92) básicamente con una pregunta entre manos: Cuál será el destino de Don Draper, el personaje interpretado por el actor Jon Hamm.

¿Y cuál es? Mejor ahorrémonos el spoiler y guardemos la sorpresa para el turno de la audiencia chilena, aunque sí les podemos adelantar algo: El final sur aprobado por los fanáticos más acérrimos dela serie.

Así, al menos, da cuenta una encuesta "a boca de urna" realizada por la agencia AFP, aprovechando que en diversos bares y restoranes de Estados Unidos, comunidades de seguidores se reunieron para ver el final de manera conjunta. Algunos hasta luciendo looks alusivos a algunos de los personajes.

Aplausos, sorpresa y satisfacción es lo que se pudo constatar en esas plazas, incluso con algunos fans asegurando que éste "es uno de los mejores finales de serie que he visto".

Personajes complejos, estética de época, excelente fotografía y un ritmo ajeno a los imperantes en televisión, fueron algunos de los elementos que lograron transformar a "Mad Men" en fenómeno de público y crítica.

La producción se estrenó un mes después del fin de "Los Soprano", el otro gran mito reciente de este género, y abrió una era dorada para el canal de TV por cable AMC, que posteriormente emitiría las exitosas "Breaking Bad" (2008-2013) y "The Walking Dead" (estrenada en 2010).

Ganadora de cuatro Globos de Oro y 15 premios Emmy, la serie contó la vida en una agencia de publicidad en el Nueva York de los años 60, época que reflejó. Además, fue destacada por poner el dedo en la llaga en temas como el sexismo y el racismo.