SANTIAGO.- La vicerrectora de Asuntos Estudiantiles de la Universidad de Santiago de Chile, Lenka Fridman, consideró como un alivio para las casas de estudios superiores la propuesta del Ministerio de Educación respecto de la nueva reforma al crédito universitario, en la que se prevé -entre otras cosas- la creación de una Agencia de Crédito Estudiantil, que además de otorgar el fondo, cobrará a quienes ya deben cancelarlo.
En conversación con Radio Chilena, señaló al respecto que "las Universidades estatales pedían desde hace tiempo que la administración del fondo no dependiera de las universidades directamente, sino de una entidad central. Es muy alto el costo de administrar este fondo".
Acerca de la posibilidad de que muchos estudiantes dejen de optar por las universidades tradicionales -adjuntas al Consejo de Rectores- por la cobertura que tendría el crédito estudiantil -se abrirá, según el proyecto, a las casas de estudios públicas y privadas-, la funcionaria indicó que "las universidades tradicionales tienen características que las hacen más atractivas y permanentemente necesarias para la sociedad nacional y los jóvenes y sus padres así lo reconocen y lo entienden", por lo que desestima esta idea.
En otro punto, señaló que "yo me alegraría mucho de que los institutos de formación técnica, los centros de formación técnica recibieran esta ayuda, porque también reciben un segmento poblacional bastante desposeído en términos económicos".
No obstante, sostuvo que, en el caso de las universidades públicas nuevas, debido a que a ellas acceden -a su juicio- quienes pueden pagar sus estudios, "no debiera significar un mayor uso de recursos para jóvenes que a ellas asistan", por lo que considera que esto no debiera provocar mayores problemas.
Asimismo, se refirió a la idea de incrementar el número de jóvenes que realizan sus estudios superiores en Chile -cabe señalar que en el país el 27 por ciento de ellos acceden a la educación superior, según lo indicó ayer la jefa de la división de educación Superior del Ministerio de Educación, Pilar Armanet-.
En este sentido, Fridman indicó que "lo que ha estado ocurriendo es que en la medida que más jóvenes pasan por la enseñanza media, obviamente aspiran a llegar a la universidad y eso se ha producido año a año con un porcentaje creciente que de alguna manera han sido recibidos por las universidades privadas y que ojalá también vayan siendo recibidos por las instituciones de formación técnica, de formación de técnicos y de carreras de mandos medios".
Al respecto formuló que las universidades públicas están preparadas para acoger a más estudiantes en la medida que tengan los recursos "porque el sistema nos ha llevado a endeudarnos como institución, no es un problema que se limite solamente al acceso para los estudiantes sino que también va por el tema del financiamiento de las propias universidades", las cuales reciben, tomando por ejemplo el caso de la USACH, un 20 por ciento por parte del Estado.
