SANTIAGO.- Como una "equivocación o mala interpretación" de sus palabras calificó hoy el rector de la Universidad de Chile, Luis Riveros, la información de que serían despedidos alrededor de 120 funcionarios de esta casa de estudios superiores.
Riveros aclaró que no son despidos, sino "retiros pactados" a los que se podrán suscribir aquellos funcionarios que, habiendo cumplido su período y edad para jubilar, no lo han hecho debido a que la pensión de las AFPs que les correspondería "es francamente para la risa".
Ello porque, según explicó Riveros, "el Estado y la universidad nunca les pagó el sueldo completo, en término de sus imposiciones", por lo que las jubilaciones serían ahora muy bajas. Por lo tanto, quienes estando en condiciones de retirarse no lo hacen, "causándole un problema a la organización".
El plan consiste en acordar retiros pactados para las personas que sean "elegibles", de manera que la universidad pueda pagar la diferencia entre lo que recibirán por la AFP y lo que recibirían por el INP, en el antiguo sistema.
Sistema educativo chileno necesita cambios de fondo
El rector de la Universidad de Chile realizó estas declaraciones tras inaugurar el año académico de esta casa de estudios, ocasión en la que afirmó que "el sistema universitario chileno necesita cambios de fondo en cuanto a organización, definición de reglas y financiamiento, para que pueda así cumplir su imprescindible rol en el desarrollo del país".
Asimismo, manifestó su preocupación en torno a que el sistema de educación superior y las medidas que se le aplican no hayan experimentado revisiones y definiciones sobre la base de una política de Estado, a una conceptualización respecto del rol que éste debe cumplir particularmente en relación "con la movilidad social que debe promoverse por medio de una política de igualdad de condiciones y oportunidades para nuestros jóvenes".
Luis Riveros añadió que la buena educación pública pasa por una definición "constructiva" sobre el rol de la universidad estatal y especialmente respecto de la Universidad de Chile y recalcó que "el sistema necesita reglas remozadas de organización, las cuales hemos planteado en forma reiterada, como asimismo de regulación y supervisión".
Por último, Riveros destacó que éste es un año de decisiones importantes para la universidad y que aunque ésta ha sido exitosa en variados ámbitos del quehacer, como en proyectos de investigación y docencia, y en emprender algunas transformaciones en la planta física, añadió que todo ello no es suficiente y que es necesario consolidar los avances para que se empiecen a notar en el trabajo académico diario.
