SANTIAGO.- El biministro de Vivienda y Urbanismo y Bienes Nacionales, Jaime Ravinet, reiteró que el Gobierno tiene la voluntad de resolver el problema que afecta a los pobladores de ocho villas de Puente Alto que ayer iniciaron una huelga de hambre para exigir la condonación total de las deudas por sus casas, construidas por la empresa Copeva.
Sin embargo, indicó que es una situación que no les corresponde intervenir, pues se trata de un proyecto privado en el que el Estado sólo otorgó el subsidio habitacional.
"Los reclamos en materia técnica deberían ir o a la firma organizadora o a la empresa constructora, y las deudas que ellos reclaman que se les condonen, son con el sector privado o financiero (...). Lo único que yo puedo hacer es interceder, escucharlos y ver cómo poder ayudarlos", enfatizó.
Asimismo, Ravinet recalcó que "las huelgas de hambre, con las presiones indebidas, no nos apartarán de las instrucciones del Presidente de la República de resolver el tema, y lo estamos resolviendo".
El secretario de Estado hizo estas declaraciones hoy tras reunirse con el primer mandatario en La Moneda para tratar la construcción de viviendas sociales en los terrenos del Aeropuerto de Cerrillos, en el marco del proyecto Portal Bicentenario.
Cabe mencionar que los pobladores de estas villas se sienten víctimas de Copeva, que en 1995 entregó más de 6 mil casas con problemas estructurales.
Los inmuebles corresponden al Programa Especial para Trabajadores (PET), que fue creado en 1985 como parte de los programas sociales del Ministerio de Vivienda.
