SANTIAGO.- Repartidas en 510 albergues se encuentran las 2.229 personas que resultaron damnificadas entre las regiones Séptima y Décima a consecuencias de los temporales de los últimos días, informó esta tarde la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi).
Se indicó que estas cifras representan una disminución del 13 por ciento de damnificados y del 52 por ciento de albergados, en comparación con la situación registrada ayer martes, lo que se explica por el mejoramiento de las condiciones del tiempo.
La Onemi señaló que en la Séptima Región hay 62 albergados de un total de 230 damnificados; en la Octava son 325 albergados de 338 damnificados; en la Novena hay sólo 105 personas albergadas de un total de 1.435 damnificados, mientras que en la Décima hay 18 personas en albergues de un número de 226 damnificados.
Asimismo, se informó que las lluvias han dejado en las cuatro regiones un total de 20 viviendas destruidas; 48 con daños mayores y 959 con daños menores. En estas últimas sin embargo, igualmente sus moradores han resultado damnificados, debiendo ser evacuados a albergues o casas de parientes o vecinos.
La Oficina Nacional de Emergencia dispuso en la madrugada de hoy el despacho de elementos de ayuda a las regiones Séptima y Octava, de acuerdo a los requerimientos específicos de cada zona.
Es así como se enviaron viviendas de emergencia, planchas de zinc, mangas de plástico, cajas de alimentos, frazadas y colchonetas.
En la Intendencia de la Octava Región se informó que esta tarde comenzaron a llegar los primeros camiones con la citada ayuda.
Problemas de salud presentan damnificados en la Novena Región
La Oficina Regional de Emergencia (Oremi) y la Secretaría Regional Ministerial de la Novena Región informaron que en los servicios de salud primarios se registró un aumento de enfermedades respiratorias tanto en niños como en adultos mayores damnificados de 15 comunas del Bío Bío, como resultado del temporal que afectó a la zona, por lo cual se solicitaron fondos extraordinarios para adquirir en forma urgente medicamentos.
Por su parte, los principales daños que han afectado a la región a causa de las intensas precipitaciones se concentran en la infraestructura vial, como cortes de caminos y de puentes cortados, situación que actualmente es verificada por personal municipal y de Obras Públicas en las provincias de Malleco y de Cautín, constatándose daños en la ruta internacional asfaltada de Curarrehue.
Si bien el nivel de las aguas de los ríos de la región continúa bajando, las rutas principales dañadas por la fuerza del agua hasta el momento son 16, estimándose en 1.155 millones de pesos las pérdidas.