SANTIAGO.- Cuatro funcionarios iquiqueños de la Cruz Roja chilena que prestaban ayuda solidaria a los damnificados del terremoto en Perú regresaron hoy al país, luego de permanecer secuestrados por el alcalde de la localidad de Tarata, Juan Quispe Acero, quien habría estado motivado por afanes protagónicos respecto de la procedencia del auxilio.
Luego de trabajar un mes en el vecino país prestando ayuda a los afectados por el terremoto que afectó el sur del Perú el pasado 23 de junio, los funcionarios fueron apresados por el edil en un recinto municipal para evitar que se conociera la procedencia real de la asistencia.
En esa situación, los cuatro socorristas utilizaron sus radios portátiles para enviar mensajes de auxilio, lo que permitió que finalmente, otro alcalde y un director de colegio se enteraran de su situación por esta vía y así solucionaron el incidente.
Según el informe de los afectados, el alcalde que los apresó se encontraba bajo la influencia del alcohol cuando procedió a encerrar a los socorristas chilenos.