SANTIAGO.- Dirigentes mapuches niegan tajantemente las denuncias hechas por los dueños de predios de la Novena región en relación a la tenencia ilegal de armas por parte de estos grupos étnicos.
En ese sentido, el dirigente indígena Guillermo Loncolao dijo que tales versiones "son mentiras", agregando en forma enfática que "eso es absolutamente falso".
Al respecto, aclaró que "lo que nosotros estamos haciendo hoy es defendernos, nada más. Si estuviéramos armados la situación habría sido distinta, porque hasta hoy no ha habido ningún enfrentamiento armado con la policía que ha allanado, que ha golpeado, que ha discriminado, que ha reprimido, esa es una prueba de que no hay nadie armado".
Demandas
A juicio de Loncolao los mapuches hoy viven peor que en tiempos del régimen militar porque los Gobiernos de la Concertación no han dado cumplimiento a sus demandas básicas.
Hasta hoy día en el plano de la Educación no hay nada, porque, por ejemplo, la propuesta intercultural bilingüe no se ha concretado, "una cosa es que se hable de ello y otra cosa es que se aplique".
El dirigente también denunció la carencia de garantías para la Salud en la zona que acusa los más altos niveles de pobreza en Chile, "justamente donde los más desvalidos son los mapuches".
Respecto del problema de las tierras, indicó que está claro que "nosotros estamos exigiendo al Gobierno que se nos devuelva lo que se nos ha usurpado, nada más".
Otra de las grandes inquietudes del pueblo indígena se traduce en las nulas posibilidades de trabajo, "estamos peor que las posibilidades laborales del conjunto de la población del país", puntualizó.
Este conjunto de problemas son denunciados cada cierto tiempo por distintas organizaciones mapuches que acusan al Gobierno de hacer oídos sordos a las reiteradas solicitudes de un diálogo con la autoridad, por el contrario se "nos reprime y nos echa la fuerza pública".
Conadi
Al ser consultado por la actitud de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena respecto de estas denuncias, Loncolao afirmó que la Conadi no representa una estructura de los pueblos originarios, sino que es un organismo creado para los intereses del Gobierno, y no para ayudar a las etnias.
En base a estas carencias los mapuches piden participación y decisión del Ejecutivo sobre materias tales como la educación, territorios, salud y de identidad cultural.
"Hoy todas las cosas que se deciden para este pueblo son unilaterales a nosotros jamás se nos ha consultado, nada absolutamente", dijo.
El dirigente denunció, además, que por ejemplo hubo una ley de culto donde la "espiritualidad indígena no apareció por ningún lado, lo cual muestra el grado de poca importancia que en este momento tiene este Gobierno y este Estado con los pueblos originarios".
Resaltó que las iglesias católicas, protestantes, mormones, judíos y musulmanes están todos insertos en la iniciativa en la que "nosotros no existimos, esa es una muestra de que ni siquiera respetan el tema cultural, menos van a respetar el político, económico o el social".
