SANTIAGO.- Con motivo del aniversario número 15 del atentado terrorista a la comitiva del ex Presidente de la República, general (r) Augusto Pinochet, el Ejército de Chile realizó hoy, en el sector Cuesta Achupallas del Cajón del Maipo, una ceremonia litúrgica, a cargo del jefe del Servicio Religioso de la institución, mayor Héctor Quinteros, en recuerdo de los cinco escoltas muertos en dicho ataque.
El acto contó con la asistencia del comandante en jefe del Ejército, Teniente General, Ricardo Izurieta; del general director de Carbineros, Manuel Ugarte, y de oficiales generales pertenecientes a la Guarnición de Santiago, delegaciones institucionales y familiares de las víctimas.
Durante el responso, el mayor Quinteros destacó que "estos funcionarios del Ejército y de Carabineros han pasado a la historia de los mártires, a la historia de los victoriosos, de los que cumplieron con el deber de los que por el amor a Dios, a la Patria, a la Familia derramaron esa sangre gloriosa que brota del rojo de nuestra bandera".
En la ocasión, se procedió a la colocación de ofrendas florales en el monolito que recuerda a los suboficiales de Ejército Miguel Guerrero Guzmán, Cardenio Hernández Cubillos, Gerardo Rebolledo Cisternas, Roberto Rosales Martínez y el suboficial de Carabineros, Pablo Silva Pizarro.
Una vez finalizada la ceremonia, Lucía Pinochet Hiriart, hija del senador vitalicio, dijo que en este día "uno le rinde homenaje a los caídos, pero es una fecha de dolor".
Cortés Villa: Atentado unió a los chilenos
El director ejecutivo de la Fundación Pinochet, general (r) Luis Cortés Villa, manifestó hoy que a raíz del atentado contra Augusto Pinochet el país "se unió más que nunca para conseguir las metas y los objetivos que se había trazado el gobierno militar".
"Eso lo demuestran los tres gobiernos de la Concertación, que hoy plantean que consiguieron la democracia. La democracia la conquistamos nosotros el 11 de septiembre de 1973 y se la conquistamos, precisamente, para que ellos gobiernen hoy día y gobiernen como corresponden", sostuvo Cortés Villa.
Al respecto, insistió que el atentado perseguía "una cosa muy distinta" del proceso de retorno a la democracia programado por Pinochet, y que de haber sido consumado "habría sido tremendo".
Por su parte, el senador de la Unión Demócrata Independiente (UDI) Hernán Larraín expresó que tras 15 años del atentado existe "claramente una verdadera reconciliación" a nivel de la ciudadanía, lo que en su opinión no ocurre en el estrato de las "autoridades o de las cúpulas nacionales".
A este nivel, en opinión de Larraín, aún quedan resabios del pasado y "todavía no se han superado ciertos problemas históricos y por eso de tiempo en tiempo se enciende la mecha y se producen algunas confrontaciones".
En este aspecto, el senador opositor añadió que todos los sectores tienen que hacer esfuerzos adicionales para lograr una completa reconciliación, por lo que a su juicio es una "mala señal" suprimir el Día de la Unidad Nacional.
Esto, porque según Larraín eso significaría "abandonar el intento de reconciliación, de unidad nacional que se buscaba. Por eso creo yo que quienes están en deuda con el país son los grupos dirigentes que a nivel nacional mantienen viva las inquietudes del pasado".