BELFAST.- Los unionistas del Ulster aceptaron el jueves por la noche ingresar en el órgano de control de la policía norirlandesa encargado de gestionar su reforma, que es uno de los principales obstáculos de las negociaciones de paz entre protestantes y católicos que se llevan a cabo bajo la égida de Londres y Dublín.
El Partido Unionista del Ulster (UUP), a través de su líder David Trimble, rechazó sin embargo los proyectos de reforma de la policía presentados por Gran Bretaña.
"Admitimos que en esta fase, ocupar nuestro sitio en el Consejo nos da la mejor oportunidad para ejercer la mayor influencia en el futuro de la policía en Irlanda del Norte", declaró Trimble, al término de una reunión con John Reid, el ministro británico para Irlanda del Norte.
El UUP designará a tres miembros para ese órgano, agregó.
La reforma de la policía norirlandesa, integrada en su mayoría por protestantes, es una de las exigencias de los católicos moderados y los republicanos irlandeses.
Antes del 23 de septiembre, los principales partidos católicos y protestantes deben alcanzar un acuerdo sobre los tres temas que bloquean la aplicación de los acuerdos de paz: la reforma de la policía, la retirada del ejército británico y sobre todo el desarme del Ejército Republicano Irlandés (IRA).
La milicia republicana había anunciado en julio que había llegado a un acuerdo con la comisión internacional de desarme sobre un "método" para poner su arsenal fuera de uso, propuesta rechazada por los unionistas qye reclaman un calendario preciso. El IRA retiró su oferta unas semanas más tarde.
Si no se alcanza un acuerdo en esa fecha, Londres tendrá tres opciones: convocar nuevas elecciones, suspender las instituciones semiautónomas sine die o suspenderlas 24 horas para otorgar a los partidos un nuevo plazo de seis semanas.
El proceso de paz está congelado desde el primero de julio, fecha de la renuncia del primer ministro de la provincia David Trimble, porque el IRA no había comenzado efectivamente su desarme.