MIAMI.- Por treinta y hasta sesenta días se mantiene en suspenso la situación del chileno Juan Carlos Riquelme San Martín, acusado por el gobierno estadounidense de atentado hacia la seguridad luego que en broma dijo que portaba una bomba en el vuelo 911 del avión de la American Airlines que se dirigía de Miami a Santiago.
Luego de presentarse hoy ante la jueza Andrea Simanthon y declararse no culpable, la magistrada le comunicó que el caso ahora pasará a la Corte Federal de Fort Laudarle, que también pertenece al Estado de Florida, aproximadamente a una hora de Miami.
Riquelme continúa detenido y deberá esperar uno a dos meses para conocer el veredicto de la justicia norteamericana sobre su situación procesal.