SANTIAGO.- El ministro del Interior, José Miguel Insulza, descartó la salida de sus respectivos cargos de las máximas autoridades de Carabineros e Investigaciones, a raíz de la descoordinación registrada en ambas policías en la investigación del desaparecimiento y muerte de seis menores de edad desde la localidad de Alto Hospicio en Iquique, hace dos años.
Al ser consultado sobre el tema, el secretario de Estado sostuvo que, de acuerdo a la información de la que dispone el Gobierno, no existiría razón alguna para solicitar la renuncia de los altos mandos de las entidades policiales, al tiempo que insistió que a raíz de una pista que tenía Carabineros se pudo detectar finalmente el paradero de las malogradas escolares.
Por su parte, el subsecretario del Interior, Jorge Correa Sutil, consideró que más que errores de procedimiento en el accionar policial, hubo equivocaciones de comunicación en los organismos que llevaron a cabo las investigaciones del caso.
"Me parece que hubo errores comunicacionales claros, en el sentido de que la policía dio a conocer no debiendo hacerlo las hipótesis que estaba siguiendo respecto de esta situación. Pero la intensidad del trabajo policial, el conjunto de actividades que se realizaron, cuenta de una actividad operativa", sostuvo.
Correa añadió que debido a las apariciones de los siete cadáveres, Investigaciones inició un sumario interno para averiguar si hubo alguna falla en los procedimientos policiales.
Asimismo, el ministro secretario general de Gobierno, Claudio Huepe, defendió la figura del director de Investigaciones, Nelson Mery, descartando que se le pueda pedir la renuncia por un caso puntual en que el organismo que encabeza no haya tenido una función eficiente.
"La información que yo tengo es que en este caso concreto de Alto Hospicio se había formado un grupo de trabajo en la subsecretaría del Interior, con las policías y se estaba barajando claramente la hipótesis de un asesinato", afirmó.
En cuanto al daño moral que causó en las familias de las víctimas las especulaciones de las autoridades de Gobierno respecto a que posiblemente las niñas estaban ejerciendo la prostitución, el vocero del Ejecutivo justificó el hecho con que existieron testimonios que indicaban haberlas visto en distintas partes del país.
"Esas hipótesis se formularon porque hubo declaraciones también de gente de Alto Hospicio, de la gente del mismo lugar, que en un momento determinado plantearon que habían visto a estas personas en otros lugares. Entonces, si uno hace la historia policial de esto obviamente tiene que ser analizado por las propias autoridades de Investigaciones", argumentó.
Homicida puede ser condenado a más de una cadena perpetua
En tanto, el ministro de Justicia, José Antonio Gómez, aseguró hoy que "técnicamente" el autodenominado "sicópata de Alto Hospicio" podría ser condenado a más de una cadena perpetua si se comprueba su culpabilidad en los siete asesinatos de que se jacta y que corresponderían a las adolescentes desaparecidas en esta localidad de la Primera Región.
"En este caso, técnicamente, incluso podría ser condenado a más de una cadena perpetua y, por lo tanto, lo que va a suceder es que una persona que sea condenada por este tipo de delito no va salir nunca más de la cárcel en Chile y ese sí que es un castigo riguroso y es el que establece la penalidad nuestra hoy día", indicó Gómez en entrevista a TVN.
Respecto de la tardanza en nombrar un ministro en visita para investigar estos casos, la autoridad sostuvo que se presentaron solicitudes de este tipo, las cuales -dijo- fueron rechazadas y eso está en la "autonomía propia del Poder Judicial".
Consultado acerca de una posible equivocación de parte de las policías, el Poder Judicial y el Gobierno en la metodología seguida en este caso, Gómez precisó que "con el tiempo uno podrá decir si hubo o no equivocación, pero en su momento se hizo todo lo que era posible".
