SANTIAGO.- El Presidente chileno, Ricardo Lagos, afirmó hoy que la eventual reanudación de relaciones diplomáticas con Bolivia depende del gobierno de La Paz, pues Chile “está dispuesto” a dar ese paso.
“El tema de las relaciones lo debe resolver Bolivia. Nosotros estamos dispuestos a restablecerlas cuando a ellos les parezca conveniente”, dijo el mandatario, quien sostuvo además que la ausencia de nexos diplomáticos complica pero no impide los vínculos bilaterales.
“Creo que (la falta de relaciones diplomáticas) hace todo un poco más complejo, pero también creo que hemos establecido un nivel de relaciones muy adecuado con Bolivia”, precisó Lagos, entrevistado por la radio Cooperativa de Santiago, pocas horas después de regresar de Lima, donde participó en la XI Cumbre Iberoamericana.
En la capital peruana, el jefe del Estado chileno se reunió el sábado con su homólogo boliviano, Jorge Quiroga, con quien analizó principalmente el proyecto del país andino de exportar gas por el Pacífico a Estados Unidos y México.
Las relaciones diplomáticas entre Chile y Bolivia están interrumpidas desde 1962, con un breve paréntesis entre 1975 y 1978, a causa de la aspiración de la nación andina de recuperar un acceso soberano al Pacífico, que perdió en la guerra de 1879.
Según Ricardo Lagos, la cercanía personal que mantiene con el Presidente Jorge Quiroga y con el canciller boliviano, Gustavo Fernández, con quien trabajó para Naciones Unidas “por más de 20 años”, ha facilitado el acercamiento entre ambos países.
Respecto del proyecto del gas boliviano, del que varios puertos del norte chileno desean ser el punto de licuación y embarque, Lagos dijo que se trata de un asunto comercial, no político, y que era prematuro pronunciarse sobre cuál terminal portuaria sería la beneficiada.
Perú también está interesado en que el gas boliviano salga por sus puertos del sur y el Presidente Alejandro Toledo se manifestó dispuesto a competir con Chile por adjudicarse el proyecto.
“El gas es fundamentalmente un tema comercial; son las empresas dueñas del gas, las que van a sacarlo, las que van a resolver por dónde irá el gasoducto” subrayó Lagos.
“Lo del gasoducto es algo que resolverá el consorcio que desarrollará el proyecto; ellos harán los cálculos y verán por dónde les resulta más económico”, insistió, aunque advirtió que Chile, “más allá de lo geográfico, tiene una gran ventaja, que es su bajo riesgo país”.
También recordó que Chile, en virtud del Tratado de 1904 que fijó los límites definitivos con Bolivia, debe dar a su vecino facilidades para el paso del gasoducto y para el uso de sitios portuarios.
Insistió, al mismo tiempo, en que es prematuro hablar del puerto y el gasoducto en un proyecto que aún está en ciernes, pues ni siquiera están identificados los eventuales compradores del gas boliviano.
Según Lagos, el Presidente Jorge Quiroga explicó en la reunión de Lima que aún no está formado el consorcio que va a sacar el gas de Bolivia, ni está determinado el mercado comprador.
El Presidente chileno dijo que su colega boliviano recurrió a una analogía futbolística para explicar que el proyecto de exportación de gas aún no está definido, pues en la Cumbre dijo que era “un poquito anticipado discutir en qué autobús viajará la plantilla cuando todavía no está formado el equipo ni se sabe en qué estadio va a jugar”.
“Cuando esté el consorcio que va a sacar el gas, cuando esté la gente que lo va a comprar en Estados Unidos y México, entonces será el momento de ver los del autobús, y lo más importante no es llevarlo, sino la planta en que el gas se debe licuar antes de ponerlo arriba del barco”, subrayó.
El mandatario chileno consideró que se trata de un proyecto muy importante, con una inversión del orden de los 5.000 millones de dólares, de la cual una proporción muy importante se concentrará en las instalaciones portuarias.