SANTIAGO.- El Presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores del Transporte (Conatrach), Pedro Monsalve, convocó a un paro de actividades para el próximo 10 de diciembre en demanda de seguridad social, previsional y sueldos fijos, y advirtió que el Gobierno tiene una semana para volver al diálogo y tratar que esta movilización no se haga efectiva.
Una de las exigencias que los choferes hacen es que se use de una vez por todas y en forma obligatoria el cobrador automático, que libra a los conductores de la labor de recibir el dinero del pasaje y lo concentra sólo en conducir. Según el dirigente el gobierno falló en hacer cumplir con el uso obligatorio de esas máquinas.
Otra de las peticiones tiene que ver con el proyecto de ley que aumentaría el monto de las multas a los conductores de microbuses, lo que a juicio de Monsalve es "una injusticia" considerando las condiciones económicas que vive el país.
Además insisten en que los empresarios microbuseros paguen un salario fijo, del orden de los $500 mil a los conductores, "para que de esa forma dejen de correr a gran velocidad para conseguir más pasajeros".
Otros puntos del petitorio se centran en que el Gobierno considere obligatorio el uso de cajas de cambio automáticas, que a juicio de Monsalve ayudaría a disminuir enfermedades laborales, y que se elimine la orden de empadronar a los conductores, puesto que a juicio del Presidente de la Conatrach esto es indigno para sus representados.
Monsalve sostuvo la Conatrach está dispuesta al diálogo con el Gobierno, por lo que esperan que las autoridades del ramo los reciban prontamente.
Sostuvo, además, que de efectuarse la manifestación, sería apoyada por el transporte colectivo de las regiones Quinta, Octava y Novena, y no descartó que pudiera extenderse por más días.