LA PAZ.- El gobierno boliviano calificó este miércoles de "inaceptable" la explotación gratuita que hace Chile de las aguas del Silala, ubicados en la frontera con ese país, pero aclaró que el corte del flujo de agua como exige la empresa concesionaria no depende únicamente de la Cancillería
El canciller Gustavo Fernández explicó que un eventual corte del fluido deberá ser asumida por la Superintendencia de Aguas para que, sobre la base de un pronunciamiento técnico, la Cancillería realice las gestiones necesarias ante el gobierno de Santiago.
Fernández dijo que Bolivia tiene plena soberanía de esas aguas que nacen en territorio boliviano e ingresan al norte chileno, pero reconoció que los dos países tienen posiciones encontradas y no lograron ponerse de acuerdo.
"La posición de Bolivia sobre los manantiales del Silala tiene sólidos fundamentos y no se ha modificado. Están en territorio boliviano y cualquier aprovechamiento está sujeto a la legislación nacional", dijo.
La autoridad señaló que el gobierno boliviano deberá definir en el futuro un "curso de acción para preservar los intereses nacionales".
Ductec, concesionaria de explotación de los manantiales del Silala, solicitó al gobierno permiso para cortar el flujo de agua hasta que los dos países resuelvan el conflicto.
La empresa ganó hace dos años una licitación para comerciar las aguas, derecho que, sin embargo, no fue reconocido por las empresas chilenas Codelco y Ferrocarriles Antofagasta, que explotan los recursos hídricos.
La Cancillería chilena asegura que se trata de un río con cauce internacional.