SANTIAGO.- Bastante satisfecho se mostró el ministro de Justicia, José Antonio Gómez, respecto de los anunciados que hizo el presidente de la Corte Suprema, Mario Garrido Montt, con ocasión de la inauguración del año judicial 2002.
"Se trata de trabajar en conjunto por el buien de la Justicia del país, que es un elemento esencial para que los poderes del Estado solucione los problemas que la gente está esperando en materia de Justicia", recordó la autoridad.
Gómez destacó como aspctos relevantes de la intervención a "la necesidad de mejorar la gestión judicial; en segundo lugar, establece la posibilidad de que el Poder Judicial se abra a la sociedad, la posibilidad de que los jueces tengan relación con la gente que está siendo ajusticiada; y en tercer lugar, el reforzamiento del área ética del Poder Judicial y el control ético de los abogados del ejercicio libre de la profesión".
En alusión al reclamo por las numerosas competencia que se han atribuido a los tribunales sin que estas aparejen una ampliación del presupuesto, Gómez manifestó que "en el ministerio de Justicia cada vez que presentamos un proyecto de ley, va financiado. Hemos discutido el presupuesto para que no se incumpla la ley posteriormente. Lo importante es evitar que se les dé más competencia sin que tengan los recursos para ello".
Para solucionar el problema de atochamiento de causas en tribunales, el secretario de Estado prefirió destacar soluciones más próximas, como la autorización del Congreso para crear dos nuevas salas en la Corte de Apelaciones de Santiago y una en San Miguel, Valparaíso y Concepción.
En cuanto a la aspiración del Poder Judicial, de crear dos nuevas Cortes, Gómez esgrimió que se debe dscutir eso tanto como la posible división de las cortes de mayor tamaño: "No podemos esperar dos años la creación de dos nuevas Cortes, cuando el proyecto de salas puede salir en dos o tres meses más. Tenemos prácticamente terminado el proyecto de las cortes pero la demora del tema de financiación o la aprobación nos oblígó a hacer esta propuesta de cración de salas para solucionar el atochamiento de causas".
Finalmente, el titular de Justicia descartó que una afán despolitizador haya movido a la Corte a exigir plazos para el nombramiento de nuevos ministros: "Yo he estado en el proceso de nombramiento de ministros de cortes y se toma en cuenta los antecedentes curriculares de los ministros y han sido aprobados en forma casi por unanimidad, por lo que no podemos hablar de politización".
Refieriéndose a la tardanza, el ministro declaró que trata "de hacerlo lo más expedito posible. Si se modifican plazos no hay ninguna dificultad".