SANTIAGO.- Por publicidad engañosa, once productos adelgazantes de los 44 fármacos denunciados ante el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) están siendo investigados por el Instituto de Salud Pública (ISP), dos de los cuales fueron retirados del mercado por no presentar evidencias científicas de sus propiedades adelgazantes.
Así lo informaron hoy los directores del ISP, Jeanette Vega, y del Sernac, Alberto Undurraga. Los productos retirados del mercado son "Egol Max" y "Egol Plus".
Según explicó Jeanette Vega, estos productos no tienen ningún principio activo farmacológico, ninguna droga que efectivamente sea adelgazante.
"Hay dos principios activos que están acreditados en la literatura que son los únicos que tendrían efectos (Sibutramina y Orlistat) adelgazantes, e insistir nuevamente que el tratamiento de la obesidad es un tratamiento integral, en el cual los medicamentos son sólo una parte y probablemente no la parte más importante", explicó.
En tanto, siete de los once casos no han solicitado los registros pertinentes en el Instituto de Salud, atribuyéndose propiedades terapéuticas que no han sido acreditadas científicamente, por lo que estarían incurriendo en publicidad engañosa.
Además, los dos fármacos restantes, Egol y Picolinato de Cromo se estarían vendiendo sin presentar los rótulos de advertencia y reacciones adversas para los consumidores, lo que sería ilegal.
"En base a lo anterior, el ISP inició los sumarios sanitarios de los once productos y ofició para que se hiciera el retiro del mercado inmediato de los dos circulando con registro denegado y los otros nueve productos ya se levantaron actas y están en sumario sanitario", afirmó Jeanette Vega.
En tanto, el director del Sernac, Alberto Undurraga, precisó que estas denuncias son recurrentes en este tipo de fármacos adelgazantes, por lo que llamó a la población a conocer sus derechos y saber lo que se compra.
"Mucha gente que compra un producto para adelgazar y resulta que es otra cosa, y se le vende a la gente gato por liebre, y eso en el Sernac no podemos aceptarlo", sostuvo.
Asimismo, estos fármacos son caros en el mercado. Precios que van desde los 3.930 pesos a 44.000 pesos, lo que constituyen un problema para los consumidores que "están de buena fe comprando estos medicamentos y gastando parte importante de recursos en medicamentos que no sirven", sostuvo la representante del ISP.
En tanto, la sanción a la que se exponen este tipo de irregularidades, es por una parte, el retiro del producto en el mercado y multas que van desde las 100 UTM como piso mínimo.
Jeanette Vega argumentó que se están investigando los 33 casos restantes denunciados, cuyos resultados se darían a conocer en las próximas semanas. Paralelamente, un representante del Comité Ciudadano por la Salud, Armando Becerra, aprovechó la ocasión para insistir ante las autoridades sanitarias la realización de fiscalizaciones periódicas, en contra del tráfico y venta clandestina de fármacos de dudoso origen.
Ello, para que "identifiquen a los responsables y se les sancione en forma ejemplificadora", dijo.