SANTIAGO.- Con la asistencia del ministro de Salud, Osvaldo Artaza, la Fundación Gantz Pro Ayuda al Niño Fisurado inauguró esta mañana el Hospital del Niño Fisurado.
En este pabellón se realizarán unas 200 cirugías anuales a pequeños afectados por dicha malformación congénita, más conocida como Labio Leporino.
La labor de la Fundación Gantz se orienta a la atención y rehabilitación de pacientes, desde recién nacidos hasta la vida adulta, realizando un trabajo integral, principalmente, con personas de escasos recursos.
Para la construcción del pabellón quirúrgico, la institución de beneficiencia firmó un convenio con la Corporación Chileno-Alemana de Beneficencia.
El total de fisurados que nacen en Chile anualmente son 500. El tratamiento empieza al nacer y considera una serie de operaciones de cirugía plástica, atención odontológica, de fonoaudología, de psicología, audición que en total involucra a una serie de especialistas hasta que el paciente cumple 18 años, edad en que el rostro termina de crecer. Acceder a este tipo de atención durante tanto tiempo resultaría muy difícil sin la labor de Fundación Gantz, entidad creada en 1978 que se especializa en ofrecer tratamiento integral a niños de escasos recursos.