SANTIAGO.- Un llamado a "moderar las impaciencias o las críticas poco edificantes formuladas hacia un proceso nuevo y muy complejo" realizó el Fiscal Nacional del Ministerio Público, Guillermo Piedrabuena, aludiendo a la puesta en marcha de la Reforma Procesal Penal, durante la entrega de su tercera Cuenta Pública correspondiente al período 2001-2002.
En presencia de representantes de los tres poderes del Estado encabezados por el Presidente de la República, Ricardo Lagos, Piedrabuena realizó un auspicioso balance respecto de las acciones desarrolladas por los fiscales del Ministerio Público, destinadas a construir e implementar la Reforma Procesal Penal, vigente en cinco regiones del país.
La autoridad precisó que a 15 meses de iniciada la reforma en la Cuarta y Novena regiones, y a 5 desde su comienzo en la Segunda, Tercera y Séptima, el proceso está ya implementado en el 21 por ciento del país, con cinco fiscalías regionales plenamente operativas y 727 funcionarios, cifra que aumentará a 26 por ciento, el 16 de diciembre próximo con 988 cargos, gracias a la incorporación de las regiones Primera, Undécima y Duodécima.
En cuanto a la implementación en las regiones Quinta, Sexta, Octava y Décima, las cuales representan el 30 por ciento del país y que debe materializarse a fines del 2003, el Fiscal adelantó que se han creado ya las denominadas Oficinas de Coordinación e Implementación del Ministerio Público (Ocim), organismos de avanzada a cargo de un abogado jefe, un ingeniero y un arquitecto, quienes coordinarán todas las acciones destinadas a adelantar la partida en dichas regiones.
Respecto de la Región Metropolitana, Piedrabuena informó que el año pasado solicitó a los Ministerios de Justicia y Hacienda que se adelante la elección de los cuatro fiscales regionales de Santiago a diciembre de este año, dos antes de lo contemplado, producto de la complejidad de su implementación en una región donde se concentra el 45 por ciento de la población chilena.
En ese sentido, agregó que "se requiere capacitar adecuadamente a todos los operadores del sistema y desarrollar un intenso programa de difusión e información del nuevo sistema de justicia que es bastante desconocido en Santiago".
El Fiscal Nacional reiteró su visión optimista de la marcha de la Reforma Procesal Penal en el país, afirmando que "estamos en la dirección correcta en el reemplazo de un sistema inquisitivo por uno acusatorio".
Al mismo tiempo, alertó que esta tarea involucra a todos sus operadores, jueces, defensores, policías, que deben actuar con un propósito unitario, evitando "las impaciencias o las críticas poco edificantes a un organismo que está creciendo y tratando de cumplir de la manera más eficiente posible con el cometido que le entregó la ley".