SANTIAGO.- Pese a que los gremios de la salud entendieron que con el acuerdo alcanzado anoche con el Gobierno se ponía término al plan AUGE, hoy el Ejecutivo se ganó las descalificaciones de sus interlocutores al salir en defensa del cuestionado plan y decir que éste "está más vivo y más fuerte que nunca".
Mientras el propio Presidente Lagos dijo que el plan AUGE se llevará a cabo en el marco de la reforma que el Gobierno pretende impulsar a partir del próximo discurso presidencial del 21 de mayo, el ministro del ramo, Osvaldo Artaza, dijo este martes que lo que se discutió con los gremios de la salud fueron las bases sobre las cuales se llevará efecto la pretendida reforma.
"El AUGE está más vivo y más fuerte que nunca. Lo que discutimos con los gremios fueron los lineamientos sobre los cuales AUGE se concretará. Aquí se terminaron los temores, las imprecisiones y las incertidumbres que había con relación al plan", enfatizó el ministro Artaza, al salir al paso de las interpretaciones que apuntaba a que el Gobierno había cedido ante las presiones de los gremios de la salud.
Ello llevó a la Confederación Nacional de Trabajadores de la Salud, Confenats, a denunciar que las autoridades intentan desconocer el acuerdo alcanzado anoche, y adelantaron que, en ese marco, las movilizaciones programadas para el 20, 21 y 22 de mayo próximo se mantendrán en pie.
"El Presidente Ricardo Lagos está pretendiendo humillar a las organizaciones gremiales al declarar que el plan (AUGE) sigue su curso y que nada ha cambiado con el acuerdo que hemos llegado anoche con el Gobierno. Pensamos que era un acuerdo serio y no que en las primeras horas de hoy día se diga que el acuerdo no se va a respetar", afirmó el presidente de la entidad, Jorge Araya, visiblemente molesto con la defensa del término AUGE que el Gobierno realizó esta mañana.
Que tanto Lagos como Artaza sigan hablando de AUGE, sin embargo, no significa que el plan de salud que fue concebido en un principio –con tiempos definidos de espera, copagos de máximo 20% y un financiamiento especial - sea el eje sobre el cual se reformulará el sistema de salud chileno.
Mal que mal, lo que no entendió la Confenats y el resto de los gremios es que después de las arduas discusiones y ataques que ha recibido el Gobierno por el denominado plan AUGE –sin descontar, por supuesto, la millonaria inversión en publicidad televisiva y radial-, no puede dar por sepultado el término de la noche a la mañana.
Y menos aún cuando mañana la Comisión Económica Social de la Democracia Cristiana, adoptará una postura acerca de cómo implementar la reforma de salud, decisión que, en la práctica, debería ser obiglatoria para los parlamentarios de la colectividad.
Plan Nacional de Salud por AUGE
Pese a que el propio Artaza adelantó esta mañana que en las sucesivas discusiones con los gremios el plan AUGE no estuvo en discusión, fuentes de los gremios de la salud confidenciaron que en las tratativas finales de ayer, el secretario de Estado dijo que se acababa la publicidad que se había montado para su difusión.
En términos concretos, tal como fue presentado por el Gobierno hace un mes, el llamado plan de Acceso Universal con Garantía Explícitas (que contemplaba una lista de 43 prestaciones, con tiempos definidos, un copago de hasta el 20% y un financiamiento especial), dejó de ser el pilar fundamental sobre la cual se estructurará la reforma a la salud.
De hecho, en el documento consensuado anoche se reemplazó la palabra AUGE por la de Plan Nacional de Salud. Es decir, la canasta básica de prestaciones que deseaba establecer el Gobierno, y la cual fue entendida como un plan de seguro de salud, dejó de existir como eje articulador sobre el cual se realizarán los cambios en el sistema público y privado.
Según el documento abordado, el ahora llamado Plan Nacional de Salud significa que, en virtud de los objetivos sanitarios definidos por las autoridades del ramo, "se identificarán las necesidades de salud que por razones epidemiológicas, económicas y sociales deban ser priorizadas y explícitamente garantizadas en cuanto a su cobertura, oportunidad, atención y liberación total o parcial de los copagos, de tal manera que ninguno de estos factores se constituya en un limitante al acceso, o ponga en riesgo la economía de las personas o de las familias que la sufren".
"En términos teóricos, no importa que en el futuro el Gobierno decida que esas mismas 43 prestaciones del plan AUGE sean las prioridades sanitarias, porque en el presupuesto nacional de salud, éstas no tendrán un financiamiento separado. Si tu dices que se va a hacer el presupuesto nacional, y en éste va a haber un presupuesto para el AUGE, y uno para el resto; eso si que no lo aceptaremos", dijo el tesorero del Colegio Médico, doctor Carlos Villarroel, quien además es vocero del Congres.
Por ello, lo que el Gobierno deberá hacer ahora, dicen los involucrados, es situar la discusión en que AUGE significará reformular el sistema de salud, sobre la base de un plan que involucre una reforma a las isapres y un fortalecimiento del sector público como rector, regulador, fiscalizador, evaluador y financista del nuevo sistema.
"El temor de los gremios es que (el plan AUGE) fuera una canasta básica. Lo que quedó aclarado es que para nosotros siempre fue una manera del acceso universal. Ellos tenían el temor de que fuera una canasta básica, en la cual sólo algunos problemas se enfrentaran y todos los demás quedaran excluidos. El compromiso quedó escrito de que efectivamente esto no es una canasta", dijo Artaza sobre las aprensiones expresadas por los gremios.
Y así también lo entendió la agrupación que reúne a los 18 gremios de la salud, el Congres.
El doctor Villarroel dijo que entendido como un seguro de salud que aseguraba ciertas prestaciones, el plan AUGE "murió", y además explicó que el Plan Nacional de Salud será el mecanismo por el cual las autoridades establezcan las prioridades sanitarias del país.
En el mismo sentido, el presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores de la salud Municipalizada (Confusam), Esteban Maturana, defendió también el acuerdo suscrito con el Gobierno y estableció la diferencia entre AUGE y Plan Nacional de Salud.
"Una cosa es priorizar en salud, pero otra cosa es pretender de que AUGE es la reforma a la salud. AUGE es una pequeña parte de la reforma, es apenas un uno por ciento de todos los problemas que se deben resolver en el camino para la reforma que debemos construir", enfatizó el dirigente gremial, quien no quiso adelantar, eso sí, que se depondrán los llamados a paralización para el 20, 21 y 22 próximo.
Ello sin embargo, quedó medianamente clarificado por el vocero del Congres, quien dijo que toda vez que el Gobierno acogió los planteamientos de los gremios sobre una reforma solidaria, participativa y universal, no cabía el llamado a paralizar para esos días.
"Firmándose el día jueves el protocolo de acuerdo entre el Gobierno y los gremios, no queda otra alternativa más que incoporarnos a trabajar por una reforma solidaria", agregó el doctor Villarroel.
Si bien la decisión final deberá ser adoptada una vez que las bases de los gremios conozcan el acuerdo alcanzado con el Gobierno, el vocero del Congres adelantó que rechazan las declaraciones del Presidente Lagos y del ministro Artaza en cuanto seguir hablando de plan AUGE, y dijo que, mientras no se firme mañana el protocolo de acuerdo definitivo, el llamado a paralizar se mantiene.