SANTIAGO.- El ataque sexual es la agresión social que más traumas y temores causa entre las mujeres. Las víctimas prefieren guardar el secreto con sus familias, antes de exponer sus vivencias ante especialistas y policías.
La siguiente no es las historias de ellas, sino la de ellos, los sicópatas. Aquellos hombres que no saben de consecuencias, penas, ni arrepentimientos, y que tampoco conocen el sentimiento de culpa.
El siquiatra de la unidad de urgencia del Instituto Siquiátrico, Humberto Quijada, nos describe la mente de estos sicópatas sexuales.
- ¿Qué es la sicopatía?
- Es una alteración propia de la manera de ser de un sujeto. La sicopatía no es una enfermedad, es una manera de ser anormal. Perciben una realidad deformada, lo que hace que, por ejemplo, ellos crean que la persona a la que están violando lo desea. Tienen impulsos incontrolados. No se conmueven con nada común y corriente. Y cuando sienten algo, es tremendamente pasajero.
- ¿Cómo nace un sicópata?
- Esta alteración surge por varios elementos que se van juntando hasta dar la formación de un sujeto de esta naturaleza. Hay lugares que facilitan la aparición de los sicópatas. Cómo nacemos, cómo nos relacionamos con nuestros padres, con nuestro medio ambiente, etc. Hay características genéticas que también la facilitan. Es un trastorno de personalidad grave.
- ¿Qué sienten con respecto a la sociedad que los rodea?
- Son sujetos que chocan contra la sociedad, es decir, no acatan normas. Son insensibles frente a lo que la sociedad espera de uno. La mayoría de las personas tienen normas respecto a cómo comportarse: lo que tiene que hacer, el respetar los bienes públicos, respetar a las personas, etc. Los sicópatas no respetan nada.
- ¿Qué otras características tienen?
- Habitualmente provocan daños sin sufrir ningún tipo de remordimientos, lo que facilita que haga cosas graves y que luego actúe muy tranquilamente, como si nada hubiera pasado. Son incapaces de sentir culpa o de ligarse afectivamente a los demás. Es como si tuvieran bloqueados los sentimientos, no se conmueven con el sufrimiento ajeno. Tampoco les importan las consecuencias que tienen las atrocidades que cometen.
Se caracterizan también por ser esencialmente controladores y manipuladores. Necesitan sentirse superiores, triunfadores, muchas veces para ocultar sentimientos de inferioridad, inseguridad o vergüenza.
Además tienen una anormalidad sexual polimorfa, lo que significa que tienen varios tipos de anormalidades juntas, que para la sociedad son tremendamente graves.
Por lo general son muy inteligentes y tienen un coeficiente intelectual más alto que el normal. El sicópata actúa en forma consciente y sabe distinguir muy bien el mal del bien, razón por la cual sus ilícitos son planeados con mucha inteligencia, lo que dificulta la labor policial.
- ¿Y a qué se debe que repita sus actos de violencia?
- El sicópata normalmente reincide en sus actos. Por eso el sicópata de Alto Hospicio, por ejemplo, eligió a víctimas similares y las mató a todas de casi la misma forma.
El sicópata no aprende con la experiencia. Si a un sicópata lo detienen y le dan un castigo, apenas tenga la oportunidad va a reincidir. Por eso el pronóstico es malo, son muy pocas las cosas que se pueden hacer para modificar su conducta.
- Y cuando llega al lugar del ataque, ¿lo tiene todo planeado o actúa impulsivamente?
- El planea lo que va a hacer. Se ajusta a un impulso primario que tiene, pero llegado el momento actúa casi instintivamente. Puede violar o matar a una persona, por un impulso que tiene en ese momento, sin haberlo pensado previamente. Es una persona muy irracional que llegado el momento puede variar completamente su comportamiento.
Cuando actúa frente a una víctima, a veces lo hace de manera absolutamente difícil de entender para una persona normal. A veces se dan casos en que viola a la víctima, luego la mata y después sigue violándola.
- ¿Se puede reconocer a un sicópata?
- El sicópata tiene una especie de doble vida e incluso la gente no se da cuenta que uno puede estar sentado al lado. Tú te puedes enamorar de uno y creer que él está completamente enamorado de ti.
Estas personas son muy hábiles para fingir, son muy agradables. Con frecuencia se visten bien, andan bien presentados, están al tanto de las noticias, parecen personas normales y muy ubicadas. El problema es que son muy frágiles en su manera de ser y si en un momento eran de una determinada manera, en otro pueden cambiar de actitud.
-¿Cometen errores en sus acciones delictuales?
- Es muy difícil, puesto que todo lo planifican con anterioridad.
-¿Les gusta que los medios de comunicación hablen de ellos?
- Les encanta. Se creen tan inteligentes y están tan seguros de ser como son, que compiten con la policía y muchas veces envían hasta notas y cartas informando sobre su próximo delito.
Yo recuerdo un asesino famoso que hubo en EE.UU. que mató a 17 personas y que cuando llegó la policía a su departamento, se alegró mucho y dijo: "Pasen, adelante, los estaba esperando".
El hecho de ser descubiertos, no quiere decir que cambien su manera de ser, ni que se le quiten los deseos de seguir cometiendo este tipo de actos.
-¿El sicópata elige a sus víctimas al azar?
- No. Basta que la víctima encaje con el patrón previo del sicópata, para que él la ataque.
EL SICOPATA DE LA DEHESA
- Entonces, en el caso de La Dehesa ¿no hay azar?
- En el caso específico del sicópata de la Dehesa, hay características del delito que son comunes y eso hizo sospechar a la policía de que se trataba de una misma persona la que había cometido los delitos de Vitacura, del Parque Forestal y ahora buscan más casos afines al modus operandi del sicópata.
Esto lleva a pensar que son violaciones en serie y que cada una de sus víctimas tenía algo parecido.
Como en la mayoría de los casos, son obsesiones eróticas, ya que suelen tener en su mente muy bien delimitadas las características que deben tener las víctimas para obtener satisfacción sexual. Por ejemplo, en el caso de Vitacura, la mujer violada fue una señora de 45 años, en el Parque Forestal la niña tenía 32 años y ahora en La Dehesa la violación fue hecha a una persona de 18 años. Eso significa que todas tienen 14 años de diferencia. Algo puede existir detrás de eso.
El sicópata quería, creo yo, probar lo que se sentía violar a mujeres de distintas generaciones, cómo experimentaban la relación sexual cada una de ellas y cuál era la reacción de sus acompañantes.
- ¿Qué explica que sus acciones se parezcan en cada hecho?
- Están acostumbrados a operar de una determinada manera. Como son obsesivos compulsivos, tienden a comportarse siempre igual. Cada vez que cambien sus actos no se van a sentir bien, por eso planifican siempre de la forma más parecida posible. Estos modus operandi hacen que a los sicópatas se les descubran sus delitos. Por ejemplo, al de Alto Hospicio.
- ¿Qué pueden hacer las víctimas, en estos casos?
- Las víctimas, como están en una situación muy grave, están dominadas por el terror y actúan más que nada instintivamente. Lo más óptimo que podrían hacer las personas agredidas es actuar completamente distinto a lo que el sicópata esperaría. A lo mejor esa conducta podría romper su esquema.
