CALAMA.- En un terreno abierto de unos tres mil metros cuadrados, ubicado a poco más de un kilómetro del poblado de San Francisco de Chiu Chiu, en la Región de Antogafasta, fueron ubicados 18 puntos, casi superficiales, en los que eran totalmente visibles restos humanos pertenecientes a varios esqueletos de indefinida data de muerte.
Los restos estaban colocados en especies de pequeñas grutas subterráneas, algunas de las cuales bordeaban una forma de círculo tumbario, como si se tratara de un osario hecho a propósito, pero sin que a simple vista pudiera advertirse que siempre estuvieron en ese mismo lugar.
El desorden de los huesos, además de restos de todos los tamaños afuera de esas tumbas y algunos pequeños trozos como siguiendo un camino, traducen la presunta posibilidad de que allí hubo movimiento.
Varios fémur, caderas, costales, dos cráneos por lo menos, se hallaban tanto al interior de esas especies de tumbas, pero también fuera de ellas. Había casi insignificantes testimonios de telas y pedazos de alfarería, además de gran cantidad de monte cordillerano petrificado que correspondería a sectores de mayor altura.
Saqueo
No es indispensable la experticia para darse cuenta que allí tuvo lugar un saqueo, ya sea de tumbas ubicadas en el mismo lugar o que las sacaron de otra parte y las trasladaron. Esta posibilidad no es tan lejana, toda vez que en varias de las oquedades había bolsas de cemento vacías semidestruidas. como si hubieran sido utilizadas para el transporte de las osamentas.
El lugar está ubicado en las cercanías de algunos predios destinados al cultivo de zanahorias, pero a mayor altura y en suelos de gran salinidad, según lo muestra el deterioro de la superficie merced a la acción de las aguas de lluvia.
Magistrado
En el lugar se constituyó ayer el magistrado titular del Segundo Juzgado de Calama, Jaime Medina Jara, juez preferente de Derechos Humanos en la provincia, acompañado por el tanatólogo Rodrigo Meza, del Servicio Médico Legal; efectivos de la Policía de Investigaciones de las brigadas de Homicidio y Antinarcóticos; efectivos de Carabineros del Grupo de Operaciones Especiales Menores, Gope, de Antofagasta, y de la Primera Comisaría de Calama, quienes se encargaron de resguardar el sitio del suceso. En horas de la tarde se sumaron otros expertos en ese tipo de hallazgos.
El Gope aportó dos canes especialmente adiestrados para esos menesteres, los que contribuyeron a aumentar el hallazgo de osamentas.
La presencia en el lugar del magistrado Jaime Medina Jara se debe al hecho que tiene a su cargo la investigación de lo ocurrido en 1973, cuando en Calama hubo detenidos, desaparecidos y ejecutados políticos. De ese modo, esa magistrado está obligado a contribuir siempre que se produzca un hallazgo y de hecho, el de ayer es el más grande de todos. Inclusive superior a lo que ha ocurrido en el sector de Moctezuma y la Quebrada del Buitre.
Estudiar
El magistrado dispuso que el tanatólogo obtuviera algunas muestras del hallazgo e hiciera el estudio correspondiente para acciones posteriores relacionadas con el hecho.
El tanatólogo Rodrigo Meza dijo que en estas acciones no se puede descartar nada, pero tampoco afirmar nada. Lo que haya que hacer dependerá del resultado de los estudios. El médico coincide en que allí se produjo el saqueo de osamentas y es necesario estudiar el caso a fondo para ver si todos los restos hallados pertenecen a la misma época. En otras palabras, esto significa que no se puede descartar la posibilidad de que entre osamentas antiguas haya algunas contemporáneas.
El magistrado esperará los resultados de esos estudios para decisiones al respecto.
En el lugar estuvieron también dos de las dirigentes de la Agrupación de Familiares de Detenidos, Desaparecidos y Ejecutados Políticos, quienes explicaron que nunca han perdido la esperanza de ubicar los restos de sus seres queridos y por eso acuden a cada lugar donde el hallazgo de osamentas humanas les proporcione nuevos alientos para continuar la tarea de búsqueda que les ha significado tantas lágrimas. Sostienen que ningún resultado les desanima y que aunque han recorrido gran parte del desierto, seguirán buscando hasta hallar la verdad y en lo posible, tener el consuelo de dar digna sepultura a sus seres queridos.
Informante secreto reveló lugar al tribunal
Verdadero misterio se esconde en torno al hecho ocurrido ayer en las cercanías de Chiu Chiu. Un informante secreto dio a conocer el hallazgo al tribunal y ello motivó el intenso movimiento.
El magistrado no puede ignorar los hechos, porque está a cargo de la investigación en torno al hallazgo de osamentas en la Provincia El Loa. Incluso, en el camino de buscar la verdad, ya tiene cinco causas relacionadas con esa realidad y, ahora deberá abrir una nueva causa.
El misterio es consecuencia de las interrogantes que hay en torno a ese doloroso temario.
¿El informante, está motivado por alguna acción de la conciencia que le obliga a contribuir para ayudar al esclarecimiento de lo ocurrido? O ¿Es el informante alguien conocedor de lo que ocurrió y está obligado por el secreto, de manera que no puede salir a la luz?
¿Existe algún interés en truncarle las rutas que está siguiendo el juez, cuyo avance en las pesquisas respecto de 1973 es innegable?
Las osamentas halladas ayer no guardarían relación alguna con las de Moctezuma ni de la Quebrada del Buitre, toda vez que ese sitio está distante, en línea recta, no menos de 44 kilómetros.
Lo que se sabe a ciencia cierta es que el magistrado se hace apoyar por todos los sistemas científicos disponibles y actúa con gran rigurosidad y hasta es capaz de ignorar la falta de cooperación en algunos casos.