SANTIAGO.- En una ceremonia celebrada en el salón de honor de la Municipalidad de Santiago, el alcalde de la comuna, Joaquín Lavín, declaró hoy huésped ilustre al Presidente peruano, Alejandro Toledo, entregándole en forma simbólica las llaves de la ciudad.
En la oportunidad, el jefe comunal destacó que en la última década, cerca de 60.000 ciudadanos peruanos han llegado a asentarse a Chile y gran parte de ellos han elegido Santiago para vivir, por lo que, dijo Lavín, también "me he sentido un pequeño alcalde" de sus inmigrantes.
Asimismo, agregó que como alcalde ha sostenido un interesante trabajo con los representantes peruanos en Chile y que por estos días se inaugurará, a cinco cuadras del municipio, un lugar de encuentro para los ciudadanos peruanos, denominado El Refugio; además de una plaza de la amistad.
Por su parte, el mandatario de Perú que hoy finaliza su visita oficial al país, dijo: "Quiero expresar mi público agradecimiento por la generosidad de usted, de su ciudad, del pueblo de Chile por acoger a mis hermanas y hermanos peruanos. Mil gracias".
Agrego que esta realidad puede constituir "la semilla de una nueva integración que traspase nuestras fronteras", agregando que esta "se consigue cuando los seres humanos se extienden la mano con una voluntad de integración, de cooperación y de paz".
Manifestaciones
Pero la distinción y los aplausos al interior del municipio contrastaron con una pequeña contramanifestación de 15 peruanos que lo esperaron en la calle para lanzarle insultos.
Los manifestantes peruanos se apostaron frente a la municipalidad capitalina con un gran cartel en el que un comité de refugiados peruanos proclamó: "Toledo, el pueblo migrante te repudia por hambreador, genocida, continuador de Fujimori".
Gritos como "Toledo, Fujimori, la misma porquería" o "Toledo, hambreador, responsable de la migración" arreciaron cuando el mandatario peruano abandonó el céntrico edificio municipal. Pero su salida fue rápida y difícilmente pudo escuchar a sus detractores.