SANTIAGO.- Los jefes comunales de Melipilla, Buin, Curacaví, Paine, Calera de Tango, Pirque y Padre Hurtado denunciaron un aumento de delitos como asaltos, alcoholismo y robo de animales, lo que -a su juicio- se debe a que los planes de seguridad aplicadas en las zonas urbanas han llevado a los delincuentes a desplazarse hacia las zonas rurales.
Durante una reunión sostenida con el Subsecretario de Cabarineros, Felipe Harboe, para plantearle sus inquietudes en materia de seguridad ciudadana, el alcalde de Buin, Angel Bozán, indicó que en algunos casos los Carabineros son sacados de sus comunas para reforzar a otras grandes comunas del Gran Santiago.
"Hemos venido a pedir que se tomen medidas lo antes posible y que en la próxima distribución de recursos materiales, humanos y técnicos de Carabineros, el factor de las zonas rurales sea considerado", sostuvo.
Según el Alcalde de Curacaví, Pedro Julio, en esa zona hay 24 mil habitantes que cuentan con sólo 17 carabineros para toda la comuna. Lo mismo sucede con Pirque, donde cuentan con 7 carabineros para 16 mil personas.
Al respecto, el subsecretario Harboe indicó que lo planteado es una necesidad "tremendamente legítima", y señaló que se va a conversar con los altos mandos de la institución para canalizar las demandas y buscar alternativas para reforzar la seguridad ciudadana en esas zonas.