SANTIAGO.- Los dirigentes de la Asociación Nacional de Funcionarios del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, apoyados por la ANEF, denunciaron la existencia de prácticas antisindicales al interior de esa cartera de Gobierno.
Hoy presentaron una carta dirigida al Presidente de la República, Ricardo Lagos, en la que se expone la situación que enfrentan los funcionarios luego de haber formado la agrupación que los reúne el 27 de noviembre de 2001.
En la misiva, los dirigentes señalan que a 20 días de haber formado el gremio, fueron informados por la jefa de Administración General que se terminarían todos los beneficios que por más de 12 años habían percibido, los que consistían en uniformes, regalos, fiestas de Navidad para sus hijos, vales de mercadería en Fiestas Patrias y Navidad, además de la fiesta de aniversario de la institución.
Una vez sucedido esto, los trabajadores se organizaron para recuperar los beneficios perdidos. Con el apoyo de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF) participaron en una asamblea donde el entonces ministro secretario general de la Presidencia Mario Fernández, nombró como interlocutor válido al subsecretario Gonzalo Martner.
Según los dirigentes gremiales, recién el viernes pasado lograron reunirse con el subsecretario, un año después de que sufrieron los perjuicios, y todavía no se resuelve el conflicto.
"Las prácticas antisindicales existen en una asociación en la cual los dirigentes han sido presionados, no escuchados e incluso se les ha amenazado con que no se les reconocería su fuero legal. Creemos que los funcionarios públicos merecemos respeto y dignidad", declaró el presidente de la ANEF, Raúl de la Puente.
El dirigente agregó que el Presidente Ricardo Lagos debe cumplir con su palabra, puesto que al asumir su mandato, prometió respetar a los funcionarios públicos. Asimismo, señaló que la modernización del aparato estatal impulsada por el Gobierno, se debe hacer de la mano de los trabajadores.
Finalmente, De la Puente declaró que el subsecretario Gonzalo Martner "no puede ser un interlocutor válido ante nuestra organización". Por esta razón, los trabajadores suspenderán todo tipo de negociaciones con él, mientras no se solucione el conflicto.