SANTIAGO.- Pese a estar abierto a una discusión amplia sobre las denominadas "reformas constitucionales duras", el ministro del Interior, José Miguel Insulza, admitió hoy que la fórmula de discusión separada es compleja debido a la conexión que tienen las enmiendas entre sí.
El secretario de Estado explicó que la dependencia de cada artículo que se quiere cambiar -inamovilidad de los comandantes en Jefe de las Fuerzas Armadas; eliminación de senadores vitalicios y designados; cambios del sistema binominal y modificaciones al rol del Consejo de Seguridad Nacional (Cosena)-, "es difícil" de desconectar, porque son componentes esenciales de la conformación de la institucionalidad del país.
"Yo entiendo que hay temas que están conectados entre sí necesariamente. Es difícil desconectar los temas que tienen que ver con la forma en que se generan las instituciones del Estado, en este caso, del sistema binominal, de las atribuciones que esas instituciones tienen", precisó.
Graficó su explicación dando como ejemplo lo que ocurre con la función del Cosena, organismo que actualmente designa a los senadores institucionales, ya que su modificación no puede tratarse en forma independiente a la composición del Senado.
Lo mismo ocurre, complementó, si se quiere terminar con la inamovilidad de los jefes castrenses, porque para ello también tiene que analizarse el rol del Consejo de Seguridad Nacional, el cual el Ejecutivo aspira a trasformarlo en un asesor del Presidente de la República.