SANTIAGO.- Dispuestos incluso a ir a la cárcel están hoy los dirigentes de la Confederación Nacional de Trabajadores de la Salud (Confenats), quienes afirmaron que no depondrán el llamado a paro convocado para los días 15 y 16 de octubre.
Así lo sentenciaron hoy los trabajadores al dar a conocer el calendario de actividades que realizarán todas las federaciones de funcionarios de la salud adherentes a la movilización, cuyo objetivo e impedir que se lleve a cabo la reforma de salud en los términos que pretende el Gobierno.
Sostuvieron que no claudicarán en su intento por lograr el retiro de las iniciativas que actualmente se tramitan en el Congreso, pese a la amenaza del ministro del ramo, Osvaldo Artaza, de recurrir a la Ley de Seguridad del Estado, por considerar que la manifestación es de carácter ilegal.
En ese sentido los trabajadores insistieron en que el Ejecutivo "ha mentido" al señalar que las modificaciones al sistema de salud beneficiaran a usuarios y funcionarios, ya que el proyecto busca privatizar el sistema, condenando al usuario a ser cliente y a los trabajadores a la inestabilidad laboral.
