SANTIAGO.- La Confederación Nacional de Funcionarios de la Salud Municipalizada (Confusam) expresó su preocupación por el convenio suscrito entre el Gobierno la Universidad Católica que autoriza a este plantel administrar seis consultorios de atención primaria en la Zona Sur Oriente de la Región Metropolitana.
El presidente de la entidad, Esteban Maturana, sostuvo que la medida constituye un hecho de la mayor gravedad por cuanto es una señal absolutamente contradictoria respecto de los acuerdos Gobierno-gremios en torno a la Reforma Sanitaria, uno de cuyos puntos centrales especifica el rechazo a cualquier forma de privatización en salud.
Manifestó que el convenio dado a conocer en el día de ayer por el Presidente Ricardo Lagos en San Bernardo, "firmado con una institución de derecho privado como la Universidad Católica, es una clara muestra que el Gobierno está abierto a ceder a terceros privados su responsabilidad en salud para la población, transfiriendo para ello recursos fiscales".
A juicio de Maturana, se abre una compuerta peligrosa y cuyas consecuencias para la salud de las personas no son desconocidas para el gremio.
"La experiencia privada en salud es la experiencia del mercado, vale decir, salud expedita y de buena calidad para personas de altos ingresos, y salud lenta y de peor calidad para pobres", dijo el dirigente, agregando que ello contribuirá a más desigualdad e inequidad.
