SANTIAGO.- La superintendencia de Valores y Seguros (SVS) presentó esta mañana una nueva querella, ésta vez por el delito de entrega de información falsa, en contra del socio principal de Inverlink, Eduardo Monasterio, y otros ejecutivos del holding, ante el Segundo Juzgado del Crimen de Santiago.
El superintendente Álvaro Clarke explicó que como resultado de las investigaciones que ha efectuado el organismo que preside, y de la intervención de la que fueron objeto las empresas del grupo, se descubrió que las transacciones que se llevaban a cabo en la corredora de bolsa no quedaban registradas.
La autoridad señaló que el no registro de las transacciones implica que "falsificaron información e impidieron, en consecuencia, la fiscalización", lo que configura un delito contemplado en el artículo 56 de la Ley de Valores, y tiene una pena máxima de diez años de privación de libertad.
Clarke detalló que entre las irregularidades que cometieron los ejecutivos de Inverlink figura la falsificación de balances y transacciones, así como el ocultamiento de información sobre compras y ventas que se han llevado a cabo.
La autoridad financiera precisó que en el caso de Inverlink no sólo se ocultaba información, sino que además se llevaba una contabilidad separada, "y evidentemente el que se oculte información a cualquier ente fiscalizador se está falseando información, y eso es una infracción grave a la ley de Valores".
Respecto de la situación de los fondos mutuos que compraron parte de los documentos financieros que fueron robados a la Corfo, el superintendente afirmó que mientras el tribunal decida qué hacer con estos documentos, se dispuso la creación de una cuenta separada "de tal forma que la gente pueda retirar sus recursos".