SANTIAGO.- El Partido Demócrata Cristiano (PDC) calificó como "un fuerte golpe a la fe pública y a la confianza de los chilenos", la situación del robo de información al Baude de Inverlink a la Corfo, afirmando que estos casos "dejan en evidencia una falla en los controles e inseguridad en el funcionamiento de instituciones públicas y privadas".
Por ello, la DC --a través de un comunicado-- exhortó al Gobierno a enfrentar este problema resguardando los intereses de los más pobres y estabilizando el sistema financiero, como prioridades.
En ese sentido, el partido enfatizó que "demandará tanto del Estado como de las entidades privadas involucradas, responder por el patrimonio comprometido de los pequeños y medianos ahorrantes, y por los fondos de pensiones que pudieran verse afectados, y asegurar las prestaciones que deben brindar las entidades previsionales y de salud comprometidas por los malos manejos de sus dueños y/o ejecutivos".
Agregó que también debe asegurarse el fiel cumplimiento de las obligaciones respecto de aquellos instrumentos financieros involucrados en las operaciones, que se ajusten a los procedimientos consuetudinarios y a la normativa legal vigente.
En cuanto a la responsabilidades directivas superiores, el partido de la flechaestimó que "ellas deben hacerse efectivas respecto de los personeros que ejercían labores de responsabilidad en el ámbito estatal".
"A ellos se les demanda consecuencia y los gestos adecuados para restablecer la confianza ciudadana en el orden público económico gravemente dañado por estos hechos. En ese punto valoramos la decisión del ex Vicepresidente de Corfo, Gonzalo Rivas, de asumir lo sucedido bajo su dependencia y presentar su renuncia", añadió.
Además, la Democracia Cristiana señaló que las otras responsabilidades deben ser establecidas por las instancias administrativas y los tribunales de justicia, "de los cuales esperamos una acción rápida y que cautele con prontitud los intereses de los compatriotas que pudieran verse afectados".
"Estamos en presencia de un relajo generalizado en el comportamiento de personeros públicos y privados, de niveles medios y superiores, así como de algunos malos empresarios y dirigentes políticos, que relativizan la ética y moral para justificar un afán de lucro que termina en el enriquecimiento ilícito", concluyó la DC, agregando que "ahora se debe proceder con rapidez y hacer correcciones de fondo".