SANTIAGO.- El presidente del Celam, monseñor Jorge Jiménez, manifestó hoy al Mandatario, Ricardo Lagos, que la Iglesia Católica quiere colaborar para que la gran ciudad sea un espacio, por lo menos, menos duro para millones de personas que sufren, en el anonimato y la soledad, la exclusión y la pobreza.
Agregó que la Iglesia tiene un mensaje de esperanza en este sentido para quienes sufren la marginación en las grandes urbes del continente.
El Presidente Lagos asistió esta mañana a la casa de retiros de los Padres de Schöenstatt, en La Florida, donde una treintena de obispos de las ciudades más importantes de América, ocho de ellos cardenales, se encuentran congregados desde el martes en un Seminario sobre la Pastoral en la Megápolis, que concluye mañana jueves.
El tema del conflicto entre los Estados Unidos e Irak estuvo presente en la conversación que sostuvo el Presidente Lagos con los obispos, durante el desayuno.
El gobernante chileno reiteró que el uso de la fuerza siempre debe ser la última instancia y sostuvo que, "desgraciadamente, quedan muy pocas horas y los esfuerzos que hemos venido haciendo no han dado fruto".
Insisitó en que los objetivos del Gobierno chileno son impedir una guerra y simultáneamente lograr el desarme en Irak, dentro de la instancia multilateral de convivencia internacional que constituye Naciones Unidas.
"Si hay un conjunto de condiciones que cumpliera Irak en un plazo breve que comprueben su voluntad de desprenderse de las armas de destrucción masiva, estaríamos en condiciones de seguir avanzand", expresó el Presidente Lagos.
El seminario sobre Pastoral en la Megápolis continúa desarrollándose, con las ponencias de los peritos y expertos invitados para abordar los desafíos que se presenta a la misión pastoral en las ciudades más grandes del continente.
Esta tarde, los Cardenales y Obispos asistentes visitaron distintas parroquias de Santiago, donde celebraron la Eucaristía y compartirán con las comunidades.