SANTIAGO.- Entre el año 2000 y marzo del 2003 el contrabando de cigarrillos en Chile subió de 1,5 a 7,0 por ciento, lo que representa un volumen de 900 millones de unidades y una evasión tributaria de 50 millones de dólares anuales.
El gerente general de Chiletabacos, Michael Hardy, atribuyó el origen de este alto volumen de comercio ilegal a la Zona Franca de Iquique y a que la internación fraudulenta se produce por algunos puertos y pasos fronterizos.
Las cifras, a juicio del ejecutivo, deja en evidencia el fracaso por parte de las autoridades de Aduanas, Impuestos Internos y Carabineros para frenar el contrabando.
Hardy informó que, producto de esta situación, de la crisis económica y de la alta carga tributaria que afecta a los cigarrillos, las utilidades netas de Chiletabacos sólo aumentaron 2,0 por ciento el año pasado y llegaron a 23.812.000.000 de pesos.