SANTIAGO.- En un verdadero caos se convirtió la salida de Raquel Argandoña y su pareja, Hernán Calderón, desde el Primer Juzgado Civil de Santiago. Fue tanto el asedio periodístico que incluso la jueza, Sonia Navarro, debió dar órdenes a los gendarmes del recinto para que dispusieran medidas para que la ex Miss Chile saliera sin problemas del Tribunal.
No obstante, a las 11:55 de esta mañana, cuando la ex Miss se asomó, el desorden fue tal que gendarmes y Carabineros debieron custodiarla, pues le era imposible avanzar hasta la puerta de salida. El acoso fue de tal magnitud que los guardias decidieron sacarla por una puerta alternativa que conducía hasta el estacionamiento, desde donde minutos después se retiró en un automóvil.
Hernán Calderón, en tanto, dejó el tribunal a las 12:20 horas, sosteniendo que no tenía nada que declarar, y que si la prensa quería tener más información que se dirigiera a la “señora Argandoña”. Ante la consulta de si esta disputa legal afectará la carrera política de ambos, respondió con un enérgico e inmediato "no". El político rehusó entregar información de si llegó o no a un acuerdo con su ex pareja.
El comparendo al que Argandoña y Calderón asistieron esta mañana se prolongó por cerca de 2 horas y media.
La actual alcaldesa de Pelarco llegó al Juzgado las 8:25 horas de esta mañana, muy reservada y visiblemente molesta por la gran cantidad de prensa que la aguardaba.
Minutos antes de la llegada de la Argandoña, había arribado hasta el Juzgado Hernán Calderón, quien en breves declaraciones pidió respeto a la prensa por la compleja situación que está viviendo.
En la diligencia, la jueza habría intentado que las partes acordaran la forma en que operarán tras la ruptura, sobre todo en lo que respecta a la tuición de los dos hijos que nacieron durante los 15 años de relación que mantuvieron.
Tanto el actual Consejero Nacional de RN como la alcaldesa debieron someterse con antelación a exámenes sicológicos, diligencia que también debieron cumplir sus dos hijos.