SANTIAGO.- El juez suplente del Segundo Juzgado de Letras de Puente Alto, Pablo Orozco, confirmó hoy a la familia del ex contador del Instituto de Economía de la Universidad de Chile Daniel Figueroa, que los restos óseos hallados el 13 de abril pasado en el Cajón del Maipo corresponden al ex funcionario.
El magistrado, que asumió la investigación el sábado pasado, dio a conocer hoy los datos que contenía el informe elaborado por el Servicio Médico Legal, el que realizó pruebas de ADN a las osamentas.
Figueroa desapareció el 23 de diciembre pasado en extrañas circunstancias y sus restos fueron encontrados por lugareños en el sector de La Puntilla a orillas del río Maipo.
La familia de Figueroa, que se encuentra muy afectada con la noticia, interpuso una querella por el presunto delito de secuestro, argumentando que no creen en la tesis de que el ex contador se habría suicidado producto de la depresión que sufría.
Figueroa manejaba información clave sobre el manejo de los dineros del Instituto de Economía de la Casa de Bello y, específicamente, de los ahora cuestionados convenios con el Ministerio de Obras Públicas, por lo que la ministra en visita Gloria Ana Chevesich se encuentra analizando su presunta vinculación con el caso MOP-Ciade.
Sin embargo, el viernes pasado, la magistrada descartó que vaya a acumular en un futuro próximo la investigación por la muerte del ex funcionario, y afirmó que eso sólo lo puede determinar un tribunal superior.
Figueroa "era el encargado, hacía los cheques, recibía la lista de gente a quienes había que pagar, recibía las boletas y les pagaba por mandato del MOP" dijo el 12 de mayo a "El Mercurio" el ex decano y presidente de Idecon, Ricardo Paredes, procesado en los casos GATE y MOP-Ciade.
Según Paredes, Figueroa fue separado del cargo por problemas administrativos emanados de su depresión, que su familia reconoció, ya que "comenzó a enfermarse, empezó a tener un manejo desordenado con el MOP y ahí hubo algunos pequeños problemas de tipo administrativo".
El 23 de diciembre de 2002 el ex contador salió de su casa en San Joaquín y no volvió, por lo que su familia presentó una denuncia por presunta desgracia en el Segundo Juzgado de San Miguel. Sin embargo, los expedientes fueron trasladados al Segundo Juzgado de Letras de Puente Alto puesto que a ese tribunal le corresponde investigar el caso debido a que los restos fueron hallados dentro de su jurisdicción.