SANTIAGO.- El Presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores de la Salud (Confenats), Jorge Araya, rechazó rotundamente la iniciativa del Gobierno de privatizar los servicios de laboratorio, alimentación y mantención en los hospitales públicos.
Tal propuesta, según Araya, significa "perder la esencia de 50 años de historia de la salud pública en el país. Vamos a tener hospitales que van a lucrar con las prestaciones de salud, perdiendo las garantías para el 80% de la población más pobre".
Asimismo, Araya también se mostró en contra de un alza a los impuestos, ya que -a su juicio- los afectados serán los más pobres.
"Es más fácil seguir apretando a los trabajadores, que apretar a los grandes empresarios de este país", puntualizó.
Como ejemplo concreto explicó que con el nuevo impuesto anunciado, un auxiliar de servicio grado 27 recibirá 86 mil pesos de un sueldo base de 141.238.
Según la Confenats, la solución para el financiamiento del Chile Solidario y del Plan Auge pasa por la aplicación un "royalty a las transnacionales del cobre y un impuesto a las grandes riquezas de Chile".
Además, Araya advirtió que las prestaciones incluidas en el Plan Auge han bajado a 20 en su primera fase de aplicación.
"El gobierno y el Minsal han mirado la reforma sólo desde el punto de vista económica y no desde el punto de vista sanitario; es decir, con lo que podamos hacer negocio, esa es la prioridad", explicó.
Finalmente, Araya adelantó que se sumarán a la paralización que la CUT realizará en agosto, aunque -agregó- durante este mes convocará a una asamblea nacional para resolver una movilización exclusiva de los trabajadores de la salud.
