SANTIAGO.- El senador de RN Sergio Romero afirmó que no ha cometido deslealtad alguna con su colectividad al plantear una fórmula distinta de reforma constitucional para la eliminación gradual de los senadores designados, al tiempo que agregó que está siendo objeto de un "linchamiento político".
El parlamentario, quien fue pasado al Tribunal Supremo del partido por el presidente de la tienda opositora, Sebastián Piñera, afirmó que "aquí se está movilizando todo un mecanismo para que yo sea juzgado y condenado antes de que yo pueda siquiera ser notificado".
En conversación con TVN, Romero añadió que no ha propiciado iniciativas diferentes a las acordadas por el consejo político ampliado de RN, a la vez que acusó a la directiva de sobrerreaccionar frente al tema en cuestión.
Cabe recordar que las divergencias que generaron el conflicto se refieren a la gradualidad para la eliminación de los senadores designados y su reemplazo en la Cámara Alta, aumentando de dos a tres los cupos en las siete circunscripciones senatoriales más grandes del país.
Es así como Piñera planteó al Gobierno que en 2005 este cambio se aplique en cinco circunscripciones y en las dos restantes el año 2009.
Romero en cambio se inclinó en hacer la modificación en tres períodos: dos circunscripciones en 2005, otras dos en 2009 y las tres últimas en 2013.