SANTIAGO.- La Primera Sala de la Corte de Apelaciones de Rancagua, en un fallo unánime, resolvió acoger la apelación presentada por la defensa de dos actuarios encausados por el delito de falsificación de instrumento público y por lo tanto dejar sin efecto la encargatoria de reo que pesaba en su contra.
Los beneficiados son Mario Lobos y María Eugenia Bernal, actuarios del Segundo Juzgado del Crimen de Rancagua, quienes fueron acusados de haber falsificado firmas del entonces juez titular, Roberto Cociña, y del secretario del tribunal, tras una investigación realizada por la ministra en visita extraordinaria Jacqueline Rencoret.
El tribunal de alzada rancagüino, que estuvo integrado por los ministros Raúl Mera, Lilian Medina y el abogado Luis Dintran, consideró que no existen pruebas suficientes que acrediten la participación de los actuarios en los delitos que se les imputan.
El abogado de ambos funcionarios, Héctor Mason, se mostró muy satisfecho con la decisión del tribunal, que consideró el dictamen de la Corte Suprema que la semana pasada acogió un recurso de amparo en favor de otra de las actuarios procesadas, Nolfa Rubio, por considerar que no estaba acreditada su participación en los hechos.
De esta forma, la totalidad de los actuarios que fueron procesados por la ministra Rencoret quedaron libres de todo cargo.