SANTIAGO.- El abogado Rodrigo Avila, defensor de la ex secretaria del Banco Central Pamela Andrada, sostuvo hoy que su defendida reconoció haber comprado dólares en la corredora de Bolsa Inverlink para su ex jefe, Carlos Massad, en varias oportunidades.
Diversos informes policiales indicaban que Andrada adquiría dólares en la corredora de Eduardo Monasterio, situación que fue reconocida por la misma ex secretaria del ex tiular del Instituto emisor, quien recordó una compra por 8 mil dólares que realizó para su ex jefe.
Esta tarde la Décima Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago decidió rechazar la solicitud de libertad de la ex secretaria, por 3 votos a cero por considerar que es "un peligro para la sociedad" debido a la cantidad de delitos por los que está procesada.
El tribunal escuchó los alegatos por la libertad de Andrada, dictada ayer por el ministro subrogante del caso, Lamberto Cisternas, quien la otorgó con consulta a la corte.
La sala integrada por los ministros Hugo Dolmestch, Juan Manuel Muñoz y el abogado Francisco Tapia, escuchó los argumentos de Ávila, y de los abogados querellantes Marcelo Oyarcabal por el Consejo de Defensa del Estado (CDE), y Arturo Torres por el Banco Central.
Este último informó que en medio del juicio, la ex secretaria habría reconocido además que recibió unos 40 millones de pesos por filtrar información al ex gerente general del holding, Enzo Bertinelli, al propio Eduardo Monasterio, al ex director de la corredora, Pablo Schaffauser, y a Pamela Monasterio, hija del presidente del grupo Inverlink.
Según trascendió, estas operaciones se habrían registrado entre los años 1999 y 2003, totalizando pagos por 40 millones de pesos, cancelados por todos quienes recibía información secreta desde el Central.
La Décima Sala de la Corte de Apelaciones había negado en dos oportunidades la libertad a la mujer utilizando el mismo argumento que entregó hoy.
Los delitos de la ex secretaria
El 30 de enero pasado Carlos Massad descubrió por casualidad un mail en el que Andrada enviaba información privilegiada a el ex gerente general del holding Inverlink Enzo Bertinelli, quien también está procesado en la causa. Al día siguiente fue despedida y querellada por el Banco Central.
Tras conocer que era requerida por la justicia, Andrada se internó en la clínica siquiátrica Santa Sofía, donde fue interrogada por primera vez por la jueza que en ese entonces llevaba la causa, Elizabeth Reinoso.
El 14 de febrero, Andrada fue sometida a proceso por cohecho e infracción a la ley de delitos informáticos, encausamiento que el ministro en visita Patricio Villarroel amplió el 7 de marzo por considerarla autora del delito de revelación de información privilegiada. El mismo día, el magistrado ordenó el embargo de bienes contra la ex secretaria.
Veinte días después, el 27 de marzo, el juez modificó el auto de procesamiento de la mujer, al que añadió el ilícito de uso de información privilegiada, pero retiró el cargo de cohecho.
La ex secretaria permanece detenida en el anexo cárcel Capuchinos de Santiago.