SANTIAGO.- "Si un sacerdote roba, la responsabilidad es únicamente personal", así de claro fue el Cardenal Francisco Javier Errázuriz al señalar la posición de la Iglesia chilena tras el fallo en primera instancia que sentenció a 12 años de cárcel al ex sacerdote José Aguirre, más conocido como el "Cura Tato", y al Arzobispado a pagar, solidariamente, $50 millones a una de las familias afectadas.
En este sentido, el Cardenal Errázuriz calificó esta mañana como inédito el fallo de la jueza Rosa María Pinto de responsabilizar al Arzobispado de Santiago y que implica indemnizar a dos de las víctimas del ex sacerdote Andrés Aguirre Ovalle si éste no puede cumplir con esta sanción civil.
El Arzobispo de Santiago, quien se encontraba en Roma para participar en diversas actividades, en su calidad de presidente de la Conferencia Episcopal Latinoamericana (CELAM), fue abordado esta mañana, a su arribo a Santiago, acerca del fallo de la jueza Pinto.
Errázuriz afirmó que lo "inédito" se suscita al no existir jurisprudencia, lo que obliga a que sea analizado por cortes superiores. En este sentido, insistió en la necesidad de analizar la jurisprudencia que sentará este caso. Ejemplificó que si un sacerdote roba, la responsabilidad es únicamente personal.
Errázuriz dijo que lamenta la situación por la que atraviesa Aguirre y dijo que así como en todos los casos de personas que pasan por momentos aflictivos, la Iglesia se encargará de acompañarlo. El Cardenal agregó que la defensa de Andrés Aguirre evalúa como excesiva la condena, sobre todo considerando el estado de salud físico y psicológico del ex sacerdote.
Asimismo, Errázuriz valoró que la magistrada haya fallado en contra de la Iglesia a la que pertenece así como su reconocimiento del dolor que le significó tomar esta decisión.
En todo caso, aseguró que tras haber escuchado la argumentación para fallar de esta manera, las razones entregadas le parecen "raras". Como ejemplo, citó el argumento en que se afirma que si un automóvil propiedad del Arzobispado choca, los daños debe pagarlos esta institución eclesiástica. A juicio del presidente de la Conferencia Episcopal, la comparación no es válida porque un vehículo no tiene voluntad y un sacerdote nunca es propiedad de la Iglesia.
Por último, el Arzobispo declinó comentar los alcances de la proposición que esta tarde hará la Iglesia Católica al Presidente Lagos en materia de derechos humanos.
La máxima autoridad de la Iglesia Católica en Chile explicó que la visita al Santo Padre fue algo apresurada porque tenía muchas audiencias programadas debido a que era la víspera de sus vacaciones. Sin embargo, afirmó que el Sumo Pontífice dio la bendición al programa pastoral diseñado por el CELAM.