SANTIAGO.- Doscientas veinte familias, premunidas de frazadas y termos para enfrentar el frío, ocupan esta mañana los terrenos de la Villa Nuevo Buin y amenazan que al mediodía ocuparán la viviendas que les fueron asignadas, y que debieron haber sido entregadas a sus dueños en octubre del año pasado.
En el lugar, en tanto, a unos doscientos metros de los manifestantes se encuentra un nutrido contingente especial compuesto por Fuerzas Especiales de Carabineros, guanacos a la espera de desalojarlos.
El dirigente Bruno Gómez criticó al Ministerio de la Vivienda, a la empresa constructora y a la municipalidad de Buin en el retraso. Dijo que hay un problema de doble estándar, puesto que "el municipio recepcionó las casas, incluso con inscripción en el Conservador de Bienes Raíces, pero no las pueden entregar porque no tiene luz, agua, y le faltan muchos detalles".
"Nosotros hemos hecho uso del legítimo derecho de tomar lo que nos pertenece", expresó y ante la presencia policial señaló que "nosotros queremos rehuir el enfrentamiento directo, pero tenemos derecho a defendernos.
